La sala Manuel Gómez Morín fue convertida en arena
Técnicos y rudos se enfrentan en función panista de lucha libre
Ampliar la imagen Llaves, vuelos rasantes y costalazos, en la sede del blanquiazul Foto: María Meléndrez Parada
El Partido Acción Nacional (PAN) buscó ayer trasladar el ambiente de la Arena México a la sala Manuel Gómez Morín, de la sede nacional del blanquiazul. Durante la función denominada Lucha por un México ganador, el centro de atención no fueron esta vez los discursos políticos panistas, sino las llaves, costalazos y vuelos rasantes que realizaron varios luchadores profesionales.
La cartelera anunciaba una función de tres luchas libres, que tenía como objetivo hacer patente que los panistas ''luchamos por seguridad, salud, educación, empleo y medio ambiente''.
Las instalaciones del PAN mantuvieron su tradicional sobriedad desde la explanada, por donde ingresaron los invitados a la exhibición gratuita, y donde sólo había un puesto de comida y dos expendedores de máscaras de los luchadores de moda, sobre todo de Místico. La sala Gómez Morín -fundador del PAN y su principal ideólogo- perdió su solemnidad y fue momentánea arena de lucha libre; ahí se instaló un ring de seis por seis metros y gradas metálicas para mil asistentes.
A las 11 de la mañana, cuando la sala ya estaba repleta con vecinos de la delegación panista Benito Juárez, algunos visitantes de otras entidades, como Puebla, e integrantes de Acción Nacional, comenzó la función de lucha libre, organizada también para celebrar el Día del Padre. En ring side estuvieron Maximiliano Cortázar, coordinador de Comunicación Social de la Presidencia de la República, y como representantes del PAN, los secretarios de acción electoral, Arturo García Portillo, y de vinculación con la sociedad, Gerardo Priego. Ausentes, el líder nacional del blanquiazul, Manuel Espino, y el secretario general, José Espina.
Entre caída y caída, vuelo y llave, el locutor de televisión Leobardo Magadán trataba de dar un tono festivo a la función, a la vez que intercalaba llamados del PAN en su ''lucha por un México ganador''. Animaba a los asistentes a que participaran con gritos y porras en favor de tal o cual gladiador y la gente se sumaba con aplausos, silbidos y de pronto aparecían gritos aislados con dedicatoria a algunos luchadores, como ''pinche feo''.
La primera batalla, que tuvo como referi a Pompín, fue entre Tigre Metálico y Tigre Blanco, en pareja contra los japoneses Ohara y Okumura, quienes a la postre resultaron vencedores tras ganar dos de las tres caídas. Después llegaron Tarzán Boy y Mascara Año 2000, contra Heavy Metal y Volador. El cerrojazo estelar fue la campal disputada por Blue Demon, Atlantis y Ultimo Guerrero, en contra de Doctor Wagner, Alex Koslov y Rey Bucanero, donde los primeros resultaron triunfadores. Como colofón, Blue Demon obsequió una máscara azul, con el logotipo del PAN, al organizador de esta función, Gerardo Priego.