Delegados buscan acabar con problemas derivados de la indefinición territorial
Desde hoy, la Policía Montada vigilará la zona limítrofe entre Iztapalapa y Tláhuac
El operativo forma parte de un proyecto integral de prevención: Martínez y Ensástiga
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Desde hoy, elementos de la Policía Montada de la Secretaría de Seguridad Pública capitalina vigilarán la zona limítrofe de las delegaciones Tláhuac e Iztapalapa, ante la indefinición territorial que se vive
Foto: Francisco Olvera
A partir de hoy, la policía montada vigilará la zona limítrofe de las delegaciones Iztapalapa y Tláhuac, donde la indefinición territorial convirtió la zona en "tierra de nadie y la impunidad fue la ley a seguir", reconocieron los jefes delegacionales de ambas jurisdicciones, Gilberto Ensástiga Santiago y Horacio Martínez Mesa.
A través de una coordinación, los titulares de los gobiernos delegacionales acordaron con el jefe de la policía capitalina, Joel Ortega, realizar diversos operativos, los cuales estarán apoyados desde el aire por un helicóptero del grupo Cóndor. El sobrevuelo será nocturno y reforzará los recorridos que realizarán por tierra los efectivos de la Montada.
Las colonias donde iniciará el dispositivo de seguridad, y que forman parte de la zona limítrofe, son: Degollado, Molino, La Estación, Polvorilla, Zapotitla, Los Olivos y Arboledas, entre otras.
Los delitos más recurrentes y que están a la alza en el lugar, son el asalto a transeúnte y la venta y consumo de drogas, informó el jefe delegacional en Iztapalapa, Horacio Martínez, quien reconoció que en la zona "las famosas tienditas donde se comercializan los enervantes han aumentado en número''.
El operativo, señaló a su vez el titular de Tláhuac, Gilberto Ensastiga, forma parte de un proyecto integral de prevención, que incluye mejoramiento de la imagen urbana, luminarias y actividades culturales y deportivas, como el paseo ciclista y los torneos callejeros.
Gracias al acuerdo de colaboración signado por ambos gobiernos, ésta es la primera acción que se concreta, aunque queda pendiente la definición de limites y obras viales, entre otras.
Caldo de cultivo de conflictos
La zona se ha caracterizado por diversos problemas, entre los que destacan la invasión de terrenos por integrantes del dividido Frente Popular Francisco Villa, o el hacinamiento de familias por el excesivo número de unidades habitacionales en la zona, lo que ha generado violencia intrafamiliar y concentración de jóvenes ociosos, quienes han ingresado a las filas de la delincuencia.
El mismo Horacio Martínez reconoció que la indefinición territorial ha retrasado la dotación de servicios de las colonias, ''porque, aunque mucha gente vive en Tláhuac, solicitan a Iztapalapa agua, drenaje o pavimentación, según su necesidad''.
De hecho, durante uno de los encuentros conjuntos de ambos jefes delegacionales, fueron enfrentados por los vecinos, quienes les exigieron solución a los problemas de drenaje -los cuales se agudizan en temporada de lluvias-, mayor presencia policiaca y regular el transporte público, entre otras cosas.
En su momento, Gilberto Ensástiga aceptó la problemática existente en la zona limítrofe de ambas delegaciones, inclusive señaló que es "complicada y grave" por la deficiente calidad de vida de los habitantes, que lleva ya varios años sin resolverse.
"Tenemos problemas de límites territoriales, de seguridad, de servicios públicos y hasta de identidad, pues algunos vecinos se sienten de Tláhuac y otros de Iztapalapa", reconoció el funcionario.