Casi la totalidad del presupuesto debe destinarse a gasto corriente
Privilegios, dispendio, gastos médicos y grandes préstamos ahogan a San Lázaro
Los privilegios económicos, así como las prestaciones que reciben los 500 diputados federales y los altos funcionarios en la Cámara de Diputados constituyen una presión financiera tal, que casi la totalidad del presupuesto aprobado por los propios legisladores se destina a gasto corriente.
De acuerdo con el informe de la Cuenta Pública 2006, presentado por la Secretaría de Hacienda, en ese año el gasto corriente ejercido en San Lázaro fue de 4 mil 178 millones de pesos, cuando el presupuesto final de dicho ejercicio fue de 4 mil 319 millones, es decir, que para gasto de inversión y de infraestructura sólo quedó disponible un remanente de 140 millones 784 mil pesos.
Entre las contradicciones de la aplicación de los recursos en esa cámara, derivadas de la discrecionalidad, resalta que mientras el salario base de los diputados es de 76 mil 756.29 pesos -que se duplica por los apoyos que se les entregan por concepto de los rubros denominados asistencia legislativa y atención ciudadana-, el secretario general tiene un salario base de 148 mil 367.10 pesos, más prestaciones, y en un monto similar se encuentran el resto de los funcionarios con cargo de secretarios o directores de los centros de estudio de la Cámara de Diputados.
¿ISSSTE? No, gracias
Entre el dispendio, los legisladores tienen asignado un seguro de gastos médicos mayores, a pesar de que todos son afiliados al ISSSTE y cotizan a dicha institución. En este rubro, establece el resumen de erogaciones por partido, la Cámara pagó en el primer trimestre del año 19.2 millones de pesos por las primas médicas, ejercidos por las ocho bancadas y el diputado ''independiente'' Félix Castellanos Hernández.
Conforme a la tabla de gastos médicos, la bancada del Partido Acción Nacional acaparó 40 por ciento de pago de primas, con 2 millones 163 mil 950.28 pesos; le siguió el Partido de la Revolución Democrática, con 24.88 por ciento, que representó erogaciones por un millón 350 mil 80.52 pesos, mientras que los diputados del Revolucionario Institucional ejercieron un millón 309 mil 170.03 pesos, es decir, 24.13 por ciento.
Los partidos pequeños gastaron las siguientes cantidades por seguro médico: Convergencia, 196 mil 376.82 pesos (3.62 por ciento); Nueva Alianza, 153 mil 136.52 (2.82 por ciento, aun cuando sólo tiene nueve diputados, ocho menos que Convergencia); Partido del Trabajo, 109 mil 178.62 (2.01 por ciento); Partido Verde Ecologista de México, 108 mil 517.31 (2 por ciento); Alternativa, 33 mil 897 (0.62 por ciento), y Félix Castellanos mil 330.40 pesos (0.02 por ciento).
Hasta el momento, indica el informe, no se han cubierto gastos por 5 millones 425 mil 637.95 pesos del costo total de la prima contratada con la aseguradora MetLife.
Préstamos a discreción
Otro de los rubros que representan un alto costo a las finanzas de la Cámara es el de préstamos personales, tanto a diputados como a funcionarios de alto rango, a quienes se les entregan ''anticipos'' hasta por un mes de salario, a los que se les cobra un interés mensual basado en la tasa de Cetes a 28 días.
De acuerdo con el registro de anticipos otorgados a los empleados de San Lázaro al primer trimestre de este año, los funcionarios que más solicitaron dinero fueron la directora del Centro de Estudios para el Adelanto de las Mujeres y la Equidad de Género, Teresa Incháustegui, a quien el 13 de abril pasado se le entregó el cheque 520118 -no se especifica de qué banco- por 151 mil pesos, que representa un mes de su sueldo; le siguió el secretario de Servicios Administrativos, Rodolfo Noble San Román, a quien el 16 de marzo pasado se le entregó el cheque 518078 por 150 mil pesos. A pesar de que los intereses se fijan con la tasa de Cetes, Incháustegui sólo pagará 3 mil 557.48 pesos, mientras que Noble San Román liquidará 3 mil 979.50. El informe refiere que los primeros tres meses de este año se otorgaron 506 anticipos por salario a igual número de empleados y directivos de la Cámara, por un monto total de 11 millones 162 mil 862 pesos.
Otros rubros que abultan los gastos en San Lázaro son los denominados materiales y suministros, para los que este año se pretenden destinar 151.9 millones de pesos entre productos alimenticios, materias primas de producción, productos químicos, farmacéuticos y de laboratorio, así como vestuario, blancos, prendas de protección y artículos deportivos que se entregan a los sindicalizados.
Entre el capítulo mil, Servicios Personales, y el tres mil, Servicios Generales, representan para el presente año un total de 4 mil 266 millones 480 mil 323 pesos, por lo que el remanente para gasto de inversión será de 362 millones 475 mil 425 pesos.
Ayer, interrogada sobre la discrecionalidad en el manejo del presupuesto, la vicepresidenta de la Cámara, María Elena Alvarez de Vicencio, aseguró que no contaba con información sobre los gastos y agregó: ''Si me disculpan, puedo recabar la información y luego hacemos una conferencia''. Sobre los préstamos a diputados, la panista aseguró que éstos también pagan una cuota de intereses y reconoció que debe haber un límite a los derroches, porque ''en la Cámara no puede haber tantas desigualdades''.