El sueco José González y Ventilader, en el Lunario
José González, joven, con barba corta y apretados chinos, se subió al escenario entre exclamaciones de júbilo del público, se sentó bajo una fuerte luz que parecía de sala de interrogatorio y comenzó a tocar su guitarra acústica. A juzgar por el concierto, llevado a cabo este sábado en El Lunario, el músico y compositor sueco, de padres argentinos, y que canta en inglés, tiene apasionados seguidores en nuestra ciudad. Estos lo escucharon durante el corto concierto -duró menos de una hora-, sentados en el suelo. González, nacido en 1978, ya goza de cierta fama en el mundo del pop en Inglaterra y Escandinavia, y los críticos lo tratan bastante bien. Su álbum Veneer (2005, Peacefrog) tuvo gran éxito en la radio británica. Sus canciones tienen cierto aire folk y de añoranza. Son piezas íntimas, como para ser cantadas en la sala de una casa. Recuerdan, remotamente, a Demian Rice. La mayor percusión que se escucha es la del golpeteo de sus manos en la guitarra, un poco al estilo folclórico latinoamericano. A las 12, como Cenicienta, se levantó de su silla y salió, entre aplausos. La encargada de abrir el concierto fue la joven agrupación mexicana Ventilader.