Usted está aquí: domingo 3 de junio de 2007 Política Domingo

Domingo

Enrique Galván Ochoa

El sexo oral puede producir cáncer

El tesoro del fondo del mar

El tamaño cuenta

Adictos al refresco

Un grupo de investigadores de la Escuela de Medicina Johns Hopkins ha venido a añadir otra preocupación a las que ya turban nuestro sueño: el sexo oral puede ser causa de cáncer de garganta. En cualquier modalidad en que se practique: él a ella, ella a él, él a él o ella a ella. Como suele suceder, documentan su anuncio con estadísticas: si tuviste sexo oral con cinco o más parejas distintas, hay 250 por ciento más de posibilidades de que te ataque un cáncer que a otra persona que no ha caído nunca en la tentación. Aunque en México ni la Secretaría de Salud ni alguna otra institución pública o privada ha medido el porcentaje de adictos a esta afición, el Centro para Estadísticas de Salud de Estados Unidos sí llevó a cabo una encuesta y descubrió que 90 por ciento de los hombres y 88 por ciento de las mujeres habitualmente usan la boca y la lengua en sus relaciones sexuales. "El sexo oral -dicen los científicos- puede transmitir el papiloma humano, el virus implicado en la mayoría de casos de cáncer cervical. El virus se aloja en la garganta y desde ahí se desarrolla la enermedad". Apenas nos estábamos resignando a dejar el cigarrillo y ahora vienen a asustarnos con otra cosa.

El tesoro

La compañía de exploración submarina que encontró un tesoro en monedas de oro y plata en la panza de un buque que naufragó hace dos o tres siglos se resiste a dar a conocer la nacionalidad, antigüedad y tamaño del navío, y tampoco el lugar exacto del océano Atlántico donde lo encontró. Si el hallazgo fue en territorio marítimo de un país, éste podría reclamarlo. Despertó la codicia de los gobiernos de Inglaterra y España, que están hurgando en el derecho marítimo algún elemento que sirva de base para un litigio. Eventualmente México también podría tener algún derecho, pero 500 millones de dólares -valor estimado del tesoro- es una baba de perico comparada con el tesoro que políticos y empresarios se regalaron con el Fobaproa: 130 mil millones. Mientras son peras o son manzanas, Odyssey -la compañía asentada en Florida que hizo el descubrimiento- fletó un avión y se llevó a territorio gringo las 17 toneladas de oro y plata. Una de las hipótesis es que el navío hacía una travesía entre Veracruz y Nueva Orleáns cuando naufragó, no en aguas internacionales como afirma Odyssey, sino en territorio marítimo de la Nueva España.

¿Cuenta el tamaño?

En la Memoria de mis putas tristes, de Gabriel García Márquez, se atribuye al personaje central, un periodista nonagenario, la fortuna de estar dotado de un pene de medidas fuera de lo común, lo que equilibraría la desventaja en su relación con la chavita de la que se enamoró en un burdel. Pero, ¿qué hay de mito y realidad en eso de las proporciones? Estos días rompe récords de audiencia en la televisión europea un reportaje de la cadena británica Channel 4, dividido en tres capítulos: 1. El pene más grande del mundo. 2. El pene perfecto. 3. El hombre que perdió su pene. Este último se refiere al reciente caso de John Wayne Bobbitt, un ex marino estadunidense al que su mujer le seccionó el pene en un arrebato de celos. La serie televisiva tiene el propósito de aclarar qué hay de mito en este tema que, se aborde en pulgadas o centímetros, suele producir una profunda turbación en mentes masculinas y femeninas.

Adictos al refresco

Parece que no hay relación entre un asunto y otro, pero no se necesita ser un Einstein para encontrar las claves de interconexión. México ocupa el segundo lugar en obesidad -uno de cada cuatro niños tiene problemas de sobrepeso- y también ocupa el segundo lugar en consumo de refrescos (sólo Estados Unidos nos gana en ambas categorías). Es una ironía: cada vez que dizque se organiza un boicot contra la Coca-Cola, pareciera que aumentan sus ventas.

Se le ha hecho tarde a las autoridades de Salud tanto federales (José Angel Córdova) como a las de la capital del país (Manuel Mondragón y Kalb) para reglamentar el consumo de refrescos en las escuelas. En otros países de plano se ha prohibido. Pero es que hay mucho dinero de por medio: el pulpo refresquero tiene ventas por 15 mil 500 millones de dólares al año. Operan 230 plantas embotelladoras que atienden a más de un millón de expendios. Según datos de México Alimentaria -una reunión de expertos que tendrá lugar entre el martes y el jueves de esta semana-, el principal punto de venta del refresco es el changarro.

e@Vox Populi

Asunto: los 501 millones

En tu columna del viernes haces alusión a la bolsa de Melate. Valdría la pena investigar cómo se comporta el azar en los sorteos de otros países, pues es demasiado tiempo el que ha transcurrido en México sin que nadie acierte al primer lugar, lo que despierta "sospechosismos".

Fermín Contreras/Coatepec, Veracruz.

R: Mira, la suerte con frecuencia se muestra esquiva, eso no debería preocuparte tanto. La clave -¿o el clavo?- está en la identidad de los ganadores. Con eso de que por "razones de seguridad" ya no los podemos conocer -antes se les hacían entrevistas en la prensa a los ganadores de la lotería-, pues te quedas con la espinita.

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