AN debe mantener su función de partido: Ramírez Acuña
Confía SG en que prevalezca la cordura entre Espino y Mouriño
El secretario de Gobernación, Francisco Ramírez Acuña, declaró que las diferencias entre el presidente del PAN, Manuel Espino, y el jefe de la Oficina de la Presidencia de la República, Juan Camilo Mouriño, se "vienen solucionando", pero no pudo decir que están superadas por completo.
Puntualizó que el presidente Felipe Calderón es quien gobierna el país, y el PAN debe mantenerse en sus funciones como partido político.
Mediador en las pláticas que sostuvieron Mouriño y Espino -el martes pasado- en la oficinas de Bucareli, Ramírez Acuña se mostró confiado en que después de estos acercamientos prevalezcan la "cordura y la responsabilidad" en la Asamblea Nacional del PAN de este fin de semana.
A diferencia del funcionario, en entrevista, el líder nacional del blanquiazul negó que existan tales diferencias, y sólo refirió que sus reuniones con miembros del gobierno federal han sido "muy productivas y han servido muchísimo" para que haya una coordinación más intensa entre partido y gobierno.
La semana pasada, Espino culpó a la Presidencia de la República, sobre todo a Mouriño, de la derrota del PAN en las elecciones de Yucatán, argumentando que Los Pinos envió operadores políticos a esa entidad, los cuales no se coordinaron con la dirigencia del blanquiazul.
Al término de la ceremonia de presentación del Plan Nacional de Desarrollo, en Palacio Nacional, el titular de Gobernación refirió que el encuentro Mouriño-Espino ayudó a mejorar la comunicación entre los panistas que están en el gobierno y los que están en la dirigencia del partido.
El ex gobernador de Jalisco y hombre de confianza de Calderón reconoció la voluntad que tuvieron ambos para sentarse a analizar estas divergencias y buscar las coincidencias. "Algún malentendido que había por ahí se está aclarando, se está poniendo sobre la mesa", explicó.
Dijo esperar que en la asamblea que servirá para renovar el Consejo Nacional del PAN habrá un acuerdo fundamental, "pensando en el partido y en México". Consideró que el partido y el Presidente saldrán fortalecidos de este proceso interno, sobre todo Calderón, quien cuenta con el apoyo de los panistas y de los gobernadores. Declaró que el Ejecutivo tiene "oficio político", y por eso el trabajo con los partidos se ha convertido en algo cotidiano.
Más tarde, antes de su participación en un foro organizado por el semanario The Economist, Ramírez Acuña sostuvo que la relación del gobierno y el PAN debe ser de unidad, porque se requiere que las plataformas políticas que presentó el partido las pueda realizar el gobierno. Confió en que el dirigente nacional del blanquiazul entienda el mensaje y concluyan las fricciones.
Por su parte, Jorge Zermeño, presidente de la mesa directiva de la Cámara de Diputados, trató de conciliar entre Felipe Calderón y Manuel Espino, al sostener que entre ambos existe "buena relación institucional". Aseguró que la confrontación entre el Ejecutivo federal y el dirigente de su partido de ninguna manera representará un punto de discordia entre los panistas que se reunirán este fin de semana en León.