Pide imaginar escenarios distintos, como él hace; "de lo contrario no estaría en la Presidencia"

Rechaza Calderón aceptar los "fatalismos" del cambio climático

Huracanes y sequía, consecuencias en el país de no frenar el fenómeno, expone el Nobel Molina

CLAUDIA HERRERA BELTRAN

Como no cree en fatalismos, "de lo contrario no estaría aquí, en esta casa presidencial", el Felipe Calderón eludió reconocer que México tiene un panorama desolador a causa del cambio climático.

Aunque su discurso contenía esta palabra (desolador), según él mismo confesó, se declaró esperanzado de que el país logrará transformar su medio ambiente en este sexenio. Así, expresó su optimismo durante la presentación de la llamada Estrategia Nacional de Cambio Climático, un documento similar al que difundió el gobierno de Vicente Fox en octubre del año pasado, y que no contempla metas específicas ni montos presupuestales.

El titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Juan Rafael Elvira Quesada, explicó que estas previsiones aparecerán en el Programa Nacional de Cambio Climático, que se elaborará posteriormente.

Apresurado por presentar en la cumbre del G-8, que se realizará del 6 al 9 de junio en el balneario alemán de Heiligendamm, Alemania, ejemplos de su vocación ambientalista, el Presidente concluyó una semana en la que privilegió los temas de la ecología.

Acorde con la agenda verde del gobierno, la ceremonia se realizó en los jardines de la hondonada de Los Pinos. Asistieron Mario Molina, premio Nobel de Química; la secretaria general adjunta de gestión de la Organización de Naciones Unidas (ONU), la mexicana Alicia Bárcena, y ex funcionarios, como la titular de Medio Ambiente en el gobierno de Ernesto Zedillo, Julia Carabias, quien en entrevista criticó a Fox porque "abandonó el tema medioambiental".

Molina, cuyos descubrimientos han permitido que la comunidad internacional adopte medidas sobre el adelgazamiento de la capa de ozono, advirtió que por culpa del hombre ya están ocurriendo cambios muy significativos en el sistema climático del planeta, como ondas de calor, huracanes intensos, sequías, inundaciones y el deshielo de los glaciares.

Por ello el clima de México está siendo afectado por las emisiones de Asia y Africa, así como las nuestras afectan a Europa y Oceanía.

Actualmente -dijo-, el costo para afrontar este problema representa 1 por ciento del producto interno bruto (PIB) de la economía global (10 mil millones de dólares al año), pero si no se hace nada, esta cifra podría alcanzar más de 10 o 15 por ciento del PIB.

Bárcena describió este problema como el "mayor desafío económico, energético y tecnológico" de nuestro tiempo, y anunció que Calderón será consultado, como el resto de los jefes de Estado del mundo, por un panel de expertos de la ONU sobre este tema.

Las conclusiones se conocerán en la Asamblea General de Naciones Unidas que comienza el 25 de septiembre, y como "México ganó el puesto número uno en la asamblea", en una rifa anual, Bárcena dijo que es muy importante que Calderón asista a Nueva York para tratar el tema.

El documento contiene un largo listado de consecuencias en el país por el cambio climático, como la reducción drástica en la disponibilidad de agua por habitante en algunas regiones (estado de México, Guanajuato, Jalisco), extinción de bosques, reducción de la producción de madera, erosión de playas y pérdida de suelos, entre otras.

El Presidente del sí se puede

No obstante este panorama negativo expuesto por los expertos, Calderón pidió a los mexicanos imaginar escenarios distintos, como él lo hace. "No he creído en los fatalismos, en las cosas que ya están determinadas de antemano; no creo en los no se puede, de lo contrario, créanme, no estaría aquí, en esta casa presidencial".

Reconoció que las empresas públicas tienen el "mayor desafío" para mejorar su eficiencia energética, y mencionó a Luz y Fuerza, la Comisión Federal de Electricidad y Pemex.

A Bárcena, quien -según el mandatario- "tiene tantas palancas en la ONU", le adelantó que contará con el respaldo de México para construir una organización multilateral más poderosa vinculada al medio ambiente.

También llamó a los empresarios a utilizar tecnologías limpias, a los mexicanos a recuperar bosques, a los agricultores a que hagan un uso racional del agua y a los legisladores a revisar el marco legal en este ámbito.