Compran deuda barata y demandan grandes sumas
Asumirá el Club de París medidas contra "fondos buitre"
París, 23 de mayo. El Club de París informó que considerará medidas concretas para evitar que los inversionistas compren deuda de países pobres a precios bajos y luego los demanden para recuperar grandes sumas de dinero.
Entre las agencias internacionales de desarrollo, activistas y abogados existe una creciente irritación por los movimientos de los "fondos buitre", que compran deuda a precios de descuento, usualmente de países en desarrollo, y luego demandan a los gobiernos de esas naciones para obtener pagos mayores.
"La atención pública recientemente se ha centrado en la conducta de los acreedores que recurren a tácticas agresivas de litigio contra los países pobres altamente endeudados (conocidos también como HIPC, por su siglas en inglés)", dijo el Club de París.
"En cooperación con las instituciones internacionales relevantes, los acreedores del Club de París han acordado intensificar su trabajo en este tema con vistas a identificar medidas concretas para responder a este problema", agregó.
El ministro de Finanzas de Gran Bretaña, Gordon Brown, dijo al margen del encuentro del Grupo de los Ocho países más industrializados en Potsdam que las acciones de los fondos buitre son "casi escandalosas" y son una cuestión que se debe tomar en serio.
Algunos de los países afectados participan en un programa de reducción de la pobreza conocido como la iniciativa HIPC, bajo el cual se beneficiando un alivio de la deuda de parte de las organizaciones multilaterales y los acreedores oficiales.
La idea es que usen el dinero que hubieran pagado en concepto del servicio de la deuda, en proyectos en sus propios países destinados a aliviar la pobreza.
Pero el surgimiento de los juicios de los fondos buitre fuerza a algunos países pobres a usar el dinero adicional en acuerdos de reclamos por deudas, que al mismo tiempo enfurecen a los otros acreedores que pasaron a pérdida las sumas adeudadas.
"Esas acciones se aprovechan de la cancelación de la deuda concedida por otros acreedores y por lo tanto desvían recursos de los gastos para la reducción de la pobreza en el país deudor", dijo el Club de París.
En febrero, un juez británico falló que Zambia debía pagar a la firma de inversión Donegal Inernational una suma mayor que los 4 millones de dólares que pagó por la deuda del país, de acuerdo con reportes de medios.
El Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial y acreedores occidentales habían cancelado una parte considerable de la deuda de Zambia en el 2006.
Los activistas contra la deuda estaban furiosos con la decisión de la corte, argumentando que perjudicará los esfuerzos para reducir la pobreza de Zambia