Se busca que recupere espacios perdidos en el norte y el sureste durante el foxismo
Ordenan reorganización de la Armada ante pocos resultados contra el narco
Con el reconocimiento tácito de que la administración de Marco Antonio Peyrot no obtuvo los resultados esperados, particularmente en el combate al narcotráfico y el crimen organizado, el Presidente de la República ordenó la reorganización y creación de las regiones y zonas navales del país.
La decisión, que será publicada en breve en el Diario Oficial de la Federación, explicaron fuentes navales, es el primer paso de un proyecto impulsado por el almirante secretario de Marina Mariano Francisco Saynez Mendoza, para que la Armada recupere espacios abandonados por la administración anterior en zonas del sureste y norte del territorio nacional, los cuales han sido aprovechados por traficantes de drogas y de personas, principalmente.
En este contexto, la Armada dará a conocer también la conversión de Apostaderos Navales en Zonas Navales de algunos puertos que son clave para cerrarle el paso a la delincuencia, como son los casos de Huatulco, Oaxaca; Ixtapa, Guerrero, Frontera, Tabasco y San Felipe del Progreso, Baja California.
Como parte de esta estrategia y en apoyo de la seguridad pública y en contra del crimen organizado, confiaron fuentes navales, está la decisión de reorganizar las brigadas navales, creadas en el sexenio anterior, las cuales por la falta de armamento y capacitación ya no estaban en condiciones de cumplir con sus atribuciones.
En su lugar se formaron 36 batallones de infantería marítima -que también harán las veces de policía marítima-, los cuales cuentan con 500 elementos cada uno (para un total de 18 mil), los cuales se distribuirán en la zonas costeras del país, además de apoyar las labores de la Armada en la mar.
Estos batallones serán utilizados también, cuando así lo considere el Presidente de la República y comandante supremo de las fuerzas armadas, en labores de apoyo en acciones de seguridad pública, en la seguridad de los puertos nacionales y en contra del crimen organizado.
Los objetivos
Por otra parte, la reorganización de las regiones y zonas navales tiene un objetivo preciso: que en cada estado ribereño exista una zona naval que haga eficiente la labor de la Armada, pero también que los comandantes (con grado de almirantes) establezcan relaciones más cercanas de colaboración con los gobernadores de las entidades respectivas.
El acuerdo establece que habrá ocho regiones navales y un cuartel central en la ciudad de México.
En el litoral del Golfo y el mar Caribe estarán las siguientes circunscripciones:
- Primera Región Naval, que tendrá su sede en Tuxpan, Veracruz, y comprenderá la Primera Zona Naval con sede en Ciudad Madero, Tamaulipas, y la Tercera Zona Naval, con base en el puerto de Veracruz.
- Tercera Región Naval, con sede en Ciudad del Carmen, Campeche, que agrupa a la Quinta Zona Naval con sede en Frontera, Tabasco, y la Séptima Zona Naval en Lerma, Campeche.
- Quinta Región Naval, con sede en Isla Mujeres, Quintana Roo, que incluye a la Novena Zona Naval con sede en Yukalpetén, Yucatán, y la Decimoprimera Zona Naval con sede en Chetumal, Quintana Roo.
En el litoral del Pacífico estarán las siguientes:
- Segunda Región Naval, con sede en Ensenada, Baja California.
- Cuarta Región Naval, con sede en Guaymas, Sonora, que agrupa a la Segunda Zona Naval en La Paz, Baja California, y la Cuarta Zona Naval en Mazatlán, Sinaloa.
- Sexta Región Naval, con sede en Manzanillo, Colima, que comprende la Sexta Zona Naval en San Blas, Nayarit; Octava Zona Naval, en Puerto Vallarta, Jalisco, y la Décima Zona Naval en Lázaro Cárdenas, Michoacán.
- Octava Región Naval, con sede en Acapulco, Guerrero, que incluye la Decimosegunda Zona Naval con sede en Salina Cruz, Oaxaca, y la Decimocuarta Zona Naval en Puerto Chiapas, Chiapas.
El acuerdo presidencial establece que el establecimiento, operación y conservación de cada región y zona naval se llevará a cabo con los recursos presupuestarios autorizados para la Secretaría de Marina en el ejercicio fiscal correspondiente, y que en realidad no se necesitará construir nuevas instalaciones, simplemente reacondicionar las ya existentes.