Nunca un país acudió al certamen con una delegación tan numerosa: Alain Le Gourrierec
Doce cintas representarán a México en el Festival de Cannes
Recepción inédita para los filmes nacionales que participarán en casi todas las categorías
"Estamos haciendo del festival francés uno mundial sobre nuestro cine": Marina Stavenhagen
Ampliar la imagen Trabajadores colocan la manta principal de la edición 60 del Festival de Cannes, donde 22 cintas se disputarán el premio principal, la Palma de Oro, entre el 16 y el 27 de mayo Foto: Reuters
La embajada de Francia en México organizó este viernes, por primera vez, una recepción para "despedir y homenajear" a la delegación nacional que representará a 12 cintas en la edición 60 del Festival de Cannes, el cual se llevará a cabo del 16 al 27 de mayo.
El embajador Alain Le Gourrierec decidió lo anterior debido a que se trata de la representación más numerosa (100 personas), que jamás haya asistido al célebre escaparate francés. "Estamos transformando el festival de Cannes en uno internacional de cine mexicano", bromeó Marina Stavenhagen, directora de Instituto Mexicano de Cinematografía (Imcine), durante su intervención ante actores, directores, productores, funcionarios y prensa.
A la cita en la representación diplomática gala, acudieron figuras de la comunidad cinematográfica nacional, como el actor Pedro Armendáriz; Francisco Vargas, director de El Violín; Leonardo García Tsao, director general de la Cineteca Nacional, y Jorge Sánchez, director del Festival Internacional de Cine de Guadalajara.
No sólo habrá una delegación numerosa, sino que las películas serán presentadas en prácticamente todas las secciones de Cannes, entre ellas las principales: la competencia oficial y la Semana de la Crítica (de la cual Gael García será "embajador"). En tanto, la única cinta latinoamericana que competirá por la Palma de Oro (el premio principal) es la mexicana Luz silenciosa, de Carlos Reygadas.
Le Gourrierec destacó que en Cannes estará reflejado el trabajo de las talentosas generaciones que siguen de "los grandes nombres del cine mexicano", como Alejandro González Iñárritu y Guillermo del Toro (a quien por cierto, insistía en llamar Benicio).
"Es muy satisfactorio que haya primeras y segundas películas en la selección", dijo, por su parte, la directora de Imcine.
Además de Luz silenciosa, en la selección oficial, se presentará el corto Ver llover, de Elisa Miller, producido por el Centro de Capacitación Cinematográfica (CCC). Durante la Semana de la Crítica se exhibirán Párpados azules, de Ernesto Contreras; Déficit, de Gael García Bernal; el documental La palomilla salvaje, de Gustavo Gamou, y el corto En el cielo como en la tierra, de Natalia López. En tanto, Malos Hábitos, de Simón Bross, se presentará en función de gala, el 20 de mayo, cuando se celebre el 60 aniversario de Cannes.
También asistirá una delegación de Imcine para "apoyar y hacer contactos con sus pares", para futuras coproducciones. Por cierto, Luz silenciosa es una coproducción francomexicana.
En tanto, el CCC llevará a Cannes tres producciones estudiantiles. Por su parte, Natalia López (realizadora de uno de los cortos), también es editora de Luz silenciosa.
"Están el talento y la formación, el trabajo de muchos maestros que trabajamos en el CCC. Las semillas que van sembrando en las clases", dijo Angeles Castro, directora general de ese recinto universitario.
Algunas de estas cintas ya fueron premiadas en el Festival de Guadalajara, como Malos hábitos (mejor película, sección de cine mexicano) y Párpados azules (mejor película, sección de cine iberoamericano).
Euforia con resultados
"Estamos viviendo un momento de euforia positiva en torno al cine mexicano", dijo a este diario Marina Stavenhagen.
Euforia productiva, con unas 60 películas creadas el año pasado: "Había años en que sólo se filmaban dos", agregó Elsa Reyes, productora de La sangre iluminada, que va también a Cannes. "Ha habido más diversidad de proyectos, se están viviendo todas las formas de producción en México".
El eterno problema siguen siendo la distribución y exhibición. Al respecto, Stavenhagen propuso que no todas las cintas tendrían que entrar en la lógica de la distribución masiva, y ejemplificó con la exitosísima cinta El Violín, la cual buscó distribución alterna a los grandes canales y en su primera semana obtuvo el primer lugar de asistentes por copia: "Hay que apoyar los canales independientes. No creo que todas las películas sean para hacerse llegar de forma masiva, con los mismos esquemas que impone la maquinaria hollywoodense. Tenemos que ser capaces de entender qué tipo de cine estamos haciendo, para qué público, y cuál es la mejor manera de lanzarlo, para que realmente coseche los frutos que merece, y no mandarla impunemente al matadero a competir con el cine distribuido por los majors".
La película Malos Hábitos es una excepción dentro del difícil panorama: ya tiene distribuidores en prácticamente todo el planeta, sólo le falta Estados Unidos porque se está esperando a que pase Cannes para negociar.