Ana Alvarez, Valentina Rojas y Christian von Wiessel son autores de Citámbulo
Sugerente guía gráfico-literaria para ''acercarnos a lo fascinante de la urbe''
''Estamos tan acostumbrados a la cotidianidad de la ciudad de México que ya no la vemos''
Ese libro también se puede encontrar en algunas partes de Europa y próximamente en EU
Ampliar la imagen Ana Alvarez, Valentina Rojas Loa y Christian von Wiessel, autores del libro Citámbulos, durante la entrevista con La Jornada. La propuesta para las personas que deambulan por la ciudad de México, indican, se puede desarrollar de manera similar en urbes como Monterrey, Nuevo León, y Sao Paulo, Brasil Foto: Francisco Olvera
¿Cómo ver una ciudad que se pierde en lo cotidiano? ¿Se pueden descubrir nuevos lugares en las calles que se caminan todos los días? ¿La ciudad de México tiene secretos?
La respuesta está en el libro Citámbulos (neologismo cuyo significado es los que deambulan por la ciudad), que lleva como subtítulos Guía de asombros Ciudad de México y El transcurrir de lo insólito, propuesta gráfica-literaria de Ana Alvarez, Valentina Rojas Loa y Christian von Wiessel.
Citámbulos se publica, hasta ahora, en español en una coedición de Océano y el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, y en inglés por la editorial Cultura Sin Fondos -creada por Ana, Christian y Valentina-; se puede encontrar en algunas partes de Europa y pronto se distribuirá en Estados Unidos.
Vuelta de tuerca
El volumen, en su idea, nació hace más de tres años, recuerda Ana. ''Surgió porque sentíamos que las personas de la ciudad vivían con mucho malestar y no recono-cían lo fascinante de vivir en un espacio que tiene 20 millones de habitantes. Se nos ocurrió entonces hacer un libro dedicado a los habitantes de la ciudad de México, para adentrarlos y conectarlos con lo fascinante de la urbe".
La propuesta es ver a la metrópoli desde diferentes enfoques. ''Fue unir fuerzas y ver la ciudad desde la perspectiva de un arquitecto, una matemática, una especialista en letras, un biólogo, una arqueóloga... Había un chavo que se subió a todas las montañas, al que llamamos montanólogo; luego un onólogo que investigó estos onos -objetos no olvidables-, como las varillas con las que se tropieza uno en la calle. Así, por ejemplo, el caso del biólogo es especial porque es aracnólogo y tiene una perspectiva urbana diferente a partir de la distribución de las arañas en la ciudad de México", expresa Christian, arquitecto alemán de 32 años, de los cuales los pasados cinco ha vivido en la capital mexicana.
A final de cuentas todos tenemos la capacidad de asombrarnos y este libro ''es como una vuelta de tuerca en el sentido de que cuando uno ya se cansó de la ciudad te permite verla de otra manera y reconocer entonces que te gusta y puedes apreciar la riqueza de la urbe. Estamos tan acostumbrados a ella que ya no la vemos", señala Ana, matemática de 30 años de edad.
No pretendemos, aclara, que se vea lo insólito sólo como lo extravagante, sino como esa línea que corre paralela a la cotidianidad, y aquí cada uno de los temas se toca con otros para hacer un retrato de la vida contemporánea de la ciudad de México y sus aspectos centrales.
Tan sólo un dato: de los 250 lugares o personas que se recopilaron en un principio, se publican 121, y de cada uno se ofrece un texto, su ubicación, cómo llegar a él y qué otros espacios pueden visitarse. Hoy existe la posibilidad de realizar libros similares de Monterrey o Sao Paulo, mientras que el proyecto en Internet promete abarcar muchos otros aspectos de otras ciudades de una forma interactiva.
''El libro es dual; hablar de las cosas específicas de la ciudad de México, pero también insertarse en la discusión contemporánea sobre las megalópolis, que en ese sentido la ciudad es emblemática, estás hablando de una de las ciudades más grandes del mundo", agrega Ana Alvarez.
Complicidad con los lectores
Es reivindicar el espacio público -tercia Valentina Rojas Loa, de 28 años, quien estudió letras-, dejar que el lector se sorprenda con cosas como, por ejemplo, saber que Lecumberri, donde ahora están los archivos de los presidentes priístas, era el lugar destinado a los presos por robo; o que en la periferia de la ciudad existe una calle que se llama Muros de agua, como la novela de José Revueltas, en la que más allá no hay nada, sólo vacío.
''La guía es muy sugerente, las personas que la han leído empiezan a mezclar su propia experiencia. Hay como una complicidad entre quienes hicimos el libro y el lector, que se genera por ser habitantes o por hablar de un espacio conocido."
La propuesta al lector, finaliza Ana Alvarez, consiste en que ''si estamos en una ciudad que cada vez se cierra más, en la que se construyen cada vez más rejas y hay más vigilantes, hay que celebrar el espacio público como un lugar de encuentro, salgamos a la calle. Citámbulos es un libro para salir a la calle".