De Aracataca a la ciudad de México
Bogotá. No podía ser de otro modo, la exposición Gabo del alma se basa casi de modo exclusivo en la palabra escrita, y en las imágenes. Palabras casi todas de Gabriel García Márquez, de sus textos literarios, de entrevistas que le hicieron, de cosas que dijo y alguien tuvo a bien recoger. Son palabras en caracteres normales, o más grandes, o de plano gigantes.
Son fragmentos con títulos como excelentes ganchos, como ''Y entonces lo dejé todo y me dediqué a leer", o ''Sólo he sido un notario de mi realidad", o ''Escribo para que mis amigos me quieran más", o ''Nada malo me puede pasar si estoy entre mujeres", o ''Mi nostalgia es volver a ser reportero", o ''Mi relación con el cine es la de un matrimonio mal avenido", o ''La nostalgia empieza por la música", o ''Cien años de soledad no es más que un vallenato de 350 páginas", o ''El poder es un sustituto del amor", o ''No me jodan más con el Nobel".
Las imágenes aparecen en decenas de fotos (Gabo niño, Gabo joven, Gabo adulto, Gabo señor, don Gabo, el maestro Gabo, el genial Gabo, Gabo el sencillo, El Gabo), y en videos, documentales, películas.
Los pocos objetos en ese concepto de la exposición son, en realidad, muchos libros: los que ha leído, los que le han hecho y los escritos por este autor de Cien años de soledad, El coronel no tiene quién le escriba, El amor en los tiempos del cólera, El otoño del patriarca, Los funerales de la mamá grande, los Doce cuentos peregrinos, Crónica de una muerte anunciada, Noticia de un secuestro, El olor de la guayaba, de Vivir para contarla.
Todos estos libros suyos son presentados en sus diversas ediciones en castellano y en los más de 40 idiomas del mundo en que el premio Nobel de Literatura 1982 ha sido traducido.
Es una exposición curada por Juan Gustavo Cobo Borda y Gustavo Adolfo Ramírez Ariza.
El viaje por las palabras de la vida y de la obra de García Márquez va de Aracataca a la ciudad de México, pasa por Barranquilla, Santa Martha, Bogotá, La Habana, Estocolmo y otros lugares. Y pasa frente a sus pasiones: la poesía, la narrativa, la música, el cine, el periodismo.
Es un recorrido montado en el contexto de la 20 Feria Internacional del Libro de Bogotá y que continúa la fiesta iniciada en Cartagena de Indias en marzo pasado.
El texto adjunto es sólo una transcripción y una síntesis. O como se diría en la jerga periodística mexicana, es un ''chacaleo" respetuoso de las mismísimas palabras de Gabo.