Legisladores locales de PRD, PRI y Nueva Alianza
Personal de salud, obligado a acatar reforma sobre aborto
A pesar del llamado del cardenal Norberto Rivera y sus ocho obispos auxiliares, de desobedecer las reformas en materia de aborto, los médicos, enfermeras y demás personal de los hospitales de esta capital están obligados a acatar su aplicación, pues de lo contrario podrían hacerse acreedores a las sanciones que marca la Ley Federal de Responsabilidades de Servidores Públicos, afirmaron diputados locales del PRD, PRI y Nueva Alianza, quienes también insistieron en la necesidad de que la Iglesia deje de actuar políticamente y se conduzca con mesura y responsabilidad.
En entrevista, los legisladores manifestaron que no obstante esa postura de la jerarquía católica, en las modificaciones que aprobaron al Código Penal de esta ciudad se dejó a salvo la "objeción de conciencia" a la que podría apelar el personal médico.
Leticia Quezada, presidenta de la Comisión de Equidad y Género de la ALDF, consideró que los médicos y enfermeras son servidores públicos y se rigen bajo la Ley de Responsabilidades de Servidores Públicos, y por ende deben atender las solicitudes que les hagan las mujeres para interrumpir el embarazo.
Mientras que a los representantes de la Iglesia católica les pidió: "ya no se metan más en los asuntos de política; les pedimos que cada quien desde su trinchera haga lo que le corresponda por ley; ellos a profesar la fe y nosotros a legislar".
Armando Tonatiuh González Case, diputado del PRI que presentó la primera iniciativa de reformas en materia de aborto, dijo que precisamente para no generar conflictos entre los galenos y enfermeras se decidió dejar intacta la objeción de conciencia.
Por ello, dijo, la jerarquía católica lo que debe hacer ahora es apoyar a la sociedad y promover los métodos para prevenir que las mujeres lleguen a una situación de aborto, porque cuando se trata de impartir educación sexual también están en contra.
González Case añadió que tiene que haber otra actitud de los sacerdotes, pues por una parte se dan "golpes de pecho" y por la otra le dicen de todo a los políticos y a los gobernantes, entonces cómo quiere que se les tome en serio".
Agustín Guerrero, secretario de la Comisión de Gobierno, consideró que debe haber ya mesura en las declaraciones del cardenal Norberto Rivera, pues el llamar al desacato de la ley son opiniones "desafortunadas y fuera de lugar, pues llama al desorden y eso lo coloca en situación peligrosa".
Xiuh Guillermo Tenorio Antiga, del Panal, mencionó: "es muy claro que estamos en un Estado laico, donde lo que nos rige son las leyes que los mexicanos nos hemos dado, y de ninguna manera esos llamados pueden ser atendidos. Nos parece que, como dije el día de votación, es momento de llamar a la reconciliación y ver cómo le hacemos para que sean menos mujeres que lleguen a abortar, sobre todo con una mayor educación sexual".
En este contexto, el diputado Jorge Carlos Díaz Cuervo, coordinador de la Coalición Socialdemócrata de la ALDF, y autor de una de las iniciativas de reformas en materia de aborto, invitó al cardenalRivera a sostener una reunión en la sede de la Asamblea Legislativa con el objetivo de intercambiar opiniones sobre este tema y "lograr un ambiente de respeto y tolerancia entre nosotros".
A través de una misiva entregada ayer mismo en las oficinas del Episcopado de México, Díaz Cuervo le propone que dicho encuentro sea el día y la hora en que él considere más adecuados, y así establecer un "diálogo abierto y respetuoso entre la ALDF y la entidad religiosa que usted dignamente encabeza".