Totalmente destruidas, 434 casas; abren albergues para 2 mil 272 familias damnificadas

Inicia limpieza en Piedras Negras; colonos afectados, renuentes a volver

Pobladores perjudicados por el meteoro podrían ser reubicados en terrenos estatales: Moreira

LEOPOLDO RAMOS CORRESPONSAL

Piedras Negras, Coah., 27 de abril. Tres días después del tornado que destruyó la zona sur de Piedras Negras, hay quienes no desean volver a Villa de Fuente.

Petra Valadez López es una madre de familia cuya vivienda se desplomó por el tornado que pasó por el lugar el martes, antes de que anocheciera.

Desde entonces permanece en el albergue que las autoridades habilitaron en el auditorio Santiago V. González y no piensa regresar a vivir a Villa de Fuente, pues recuerda que durante las inundaciones de 2004 el agua acabó con sus pertenencias y, como ahora, también estuvo a punto de morir junto con su familia.

"Nos han dicho que a lo mejor nos reubican en otra parte de la ciudad y eso sería bueno, aunque tendríamos que empezar de nuevo con la construcción y todo, pero por algo Dios nos dejó con vida y lo que menos quiero es regresar allá abajo", señaló.

"Quiero irme de Villa de Fuente, a cualquier lugar que sea seguro. Tengo que ver por mis hijos, pero mi esposo no está muy de acuerdo en dejar el terrenito que tenemos. La casa se derrumbó y ya está pensando en cómo levantar otra vez los cuartitos", mencionó.

De las 434 viviendas que la Subsecretaría de Protección Civil en el estado detectó con daños, "más de cien están completamente destruidas" y como mucho, en algunos casos sólo quedaron dos paredes. Otras 887 casas tienen afectaciones menores, así como 2 mil 272 familias damnificadas, para quienes se abrieron dos albergues.

El gobernador del estado, Humberto Moreira Valdés, dijo más de cien familias que se quedaron sin casa podrán ser reubicadas en terrenos que el Instituto Estatal de la Vivienda tiene en el noreste de la ciudad.

"Es un área segura, está exactamente al lado contrario de Villa de Fuente y la gente tendría terrenos urbanizados", indicó.

Dijo que estas personas también tendrían acceso a programas para adquirir muebles y enseres domésticos nuevos a bajo costo y anticipó que "también los apoyaríamos con la construcción de lo que sería su nueva casa".

Por lo pronto, esta mañana más de mil voluntarios se incorporaron a los trabajos de limpieza de la zona devastada. Entre los brigadistas hay profesores, estudiantes de preparatoria y universidad y representantes de una comunidad religiosa de Texas, Estados Unidos, que se sumaron a los empleados gubernamentales.

El gobernador Moreira coordinó personalmente las acciones que en cinco días podrían permitir el desazolve total de Villa de Fuente, comunidad que se localiza al sur de Piedras Negras y la más perjudicada por la tempestad.

"Esto nos va a permitir iniciar en menos de una semana con la reconstrucción de la zona. Hay muchos daños, hay cientos de viviendas destruidas, empresas, pequeños talleres y comercios. Debemos echar mano de todas las manos disponibles para lograr que Piedras Negras se levante", anotó.

Confirmó que de las 434 viviendas detectadas con daños por la Subsecretaría de Protección Civil en el estado, "más de 100 están completamente destruidas".

La incorporación de los voluntarios en los trabajos de limpieza de las colonias afectadas por la tormenta se realizó en la plaza de Villa de Fuente, a dos cuadras de donde la joven Mayra Niño Calixto, de 20 años de edad, trata de localizar entre lo que quedó de su casa documentos e identificaciones oficiales.

"La verdad no sé por dónde empezar. No sé qué hacer. Todo quedó destruido", señaló con risa nerviosa.

Empleada de un comercio que también el viento se llevó y estudiante de una escuela técnica que superó la fuerza del tornado, esta joven morena, menudita, con anteojos, no se ve derrotada. "Todo se perdió. No quedó nada bueno, pero nosotros estamos bien, lo demás sale sobrando".

De pronto halla las fotos de su graduación de secundaria, la carta que hace años le envió una amiga, las copias de solicitudes de trabajo viejas que no alcanzó a entregar porque la llamaron del empleo que ahora tiene.

"Como luego uno dice: cuando andas buscando te encuentras todo, menos lo que te interesa", dice y vuelve a reír.

A su lado está Gloria, su tía, quien llegó para ayudar y casi al fondo del patio su novio desayuna huevos revueltos con chorizo que los voluntarios prepararon en la madrugada en la cocina comunitaria que se instaló en Villa de Fuente, para dar de almorzar, comer y cenar gratis a los damnificados y a los brigadistas.