Recuperar la confianza en las autoridades policiacas, la segunda fase de su plan
Un engaño, suponer que la inseguridad acabará pronto y fácil, asegura Calderón
Sería un "engaño o una ingenuidad" pensar que la inseguridad se resolverá pronto, advirtió el presidente Felipe Calderón, quien también anunció que la segunda fase de su estrategia contra la delincuencia consiste en recuperar la confianza en las autoridades policiacas.
El paso previo, dijo, ha sido recuperar el "poder coercitivo" del Estado, el control territorial del país que nunca debió dejar de serlo. Mientras continúan las ejecuciones en el país, el mandatario volvió a insistir en que una "guerra de esta dimensión" costará recursos, años y vidas humanas.
"No es un problema sencillo y sería un engaño, por una parte, o ingenuidad suponer que esto se arreglará pronto y fácil", agregó.
Durante su participación en un foro del periódico El Economista, Calderón desglosó las cuatro etapas de su programa de seguridad.
Reconstrucción de la fuerza policial
En el caso de la segunda, Calderón definió que es "muy larga" y consiste en la reconstrucción del entramado de procuración, administración de justicia y de la fuerza policial.
Por eso dijo que es fundamental la cooperación de autoridades estatales y municipales, sobre todo porque la fuerza pública federal, aun con toda la presencia que ha desplegado, incluyendo el Ejército y la Marina, es menor en estados y municipios.
De ahí que la meta, explicó, sea recuperar la confianza en las autoridades policiacas, no sólo para que sean diestras en el manejo de armas y estén capacitadas, sino para que sean merecedoras de la confianza de los ciudadanos.
Los pasos posteriores consisten en superar tecnológicamente a los delincuentes y hacer que los ciudadanos participen en la promoción de los valores de la honestidad y la transparencia en este ámbito. Al mismo tiempo, su gobierno impulsará programas para devolver a las familias parques, plazas, escuelas y y ciudades.
Aprovechó para defender el paquete de reformas en materia de seguridad que envió al Congreso de la Unión y señaló que servirán para dar mayor fuerza al Estado en su tarea de combatir la delincuencia organizada, y también para dotar de mejores instrumentos a las tareas de investigación y acción de la autoridad.