Poner fin a la violencia, la impunidad y la cultura de la corrupción, la estrategia
Llama Calderón a formar alianza para ganar la batalla al crimen organizado
Abanderó cadetes de Marina, en el aniversario 93 de la defensa del puerto de Veracruz
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El presidente Felipe Calderón encabezó la ceremonia de reposición de bandera de la Escuela Naval Militar, en el poblado de Antón Lizardo, Veracruz
Foto: Presidencia de la República
Alvarado, Ver., 21 de abril. Frente a los altos mandos de las fuerzas armadas, el presidente Felipe Calderón advirtió que quienes se coludan con el crimen organizado traicionan a México, y aseguró estar decidido a no ceder ninguna plaza a sus enemigos.
Por primera vez desde que la semana pasada hubo más de 20 ejecuciones en un solo día, dedicó su discurso al tema del crimen organizado y la inseguridad, que definió como "mal endémico del país", pero aseguró que con los operativos conjuntos ya se está devolviendo el poder coercitivo y la fuerza del Estado que la intimidación y la corrupción habían anulado a algunas autoridades.
Y para ganar la batalla a los delincuentes llamó a formar una "alianza" entre Federación, estados, municipios, los tres poderes de la Unión y la ciudadanía.
Al conmemorar el 93 aniversario de la defensa del puerto de Veracruz enunció los cuatro objetivos de su estrategia contra el crimen organizado, entre los que destacó poner fin a la violencia, a la impunidad y a la cultura de la corrupción, rescatar los espacios públicos de la delincuencia y devolverle la confianza a la gente para que participe en la vigilancia de las autoridades.
En el poblado de Antón Lizardo, 32 kilómetros al sureste de Veracruz, el jefe del Ejecutivo, además, tomó protesta a los cadetes de primer año y encabezó la ceremonia de reposición de bandera de la escuela. En el vistoso acto, por primera vez en la historia del plantel una mujer, la teniente de corbeta Sara Rizo Barrios, médico cirujano naval paracaidista, entregó el nuevo lábaro al mandatario.
Ante almirantes, capitanes, oficiales, cadetes y marinería de este plantel, Calderón comparó la defensa que hace 93 años hicieron los cadetes durante la invasión estadunidense con la batalla que su gobierno emprende actualmente contra el crimen organizado.
Estableció así que no abdicará de su deber de defender la nación, y aseguró que su estrategia es integral y de largo plazo para corregir, sobre bases firmes y duraderas, este mal que representa el crimen y la inseguridad.
De ahí que se esté poniendo orden en los cuerpos policiacos que en algunos niveles de gobierno y regiones del país han sido penetrados, reconoció.
Fue insistente en rechazar la colusión de las autoridades con la delincuencia. "Coludirse hoy con quienes atentan contra la seguridad en nuestro pueblo es traicionar a nuestro México, es traicionar a nuestra historia y a nuestro futuro."
En esencia, la estrategia del gobierno consiste, por un lado, en fortalecer y restablecer su plenitud al Estado y, por otro, dar mayor y mejor calidad ciudadana.
Es por eso que las fuerzas armadas están en el primer frente de combate, sin titubeos, y honró a todos los héroes que han caído en el cumplimiento de su deber, aseguró, y les rindió un homenaje. "Gloria a ellos por consagrar sus vidas al servicio de la patria".
Por ello, estableció que las fuerzas armadas no se arredran ante ningún enemigo, porque representan la paz, la moral y al pueblo unido, que es mayor a la fuerza de cualquier delincuente.
Durante el acto, estuvo acompañado de los secretarios de Marina, almirante Mariano Francisco Saynez Mendoza; de Defensa, general Guillermo Galván Galván, y de Gobernación, Francisco Ramírez Acuña, así como del jefe de la Oficina de la Presidencia, Juan Camilo Mouriño, quien reapareció después de más de una semana de ausencia en actos del Presidente. Acudieron además la esposa del mandatario, Margarita Zavala, y su hija María, quienes permanecieron en otro templete junto con familiares de funcionarios y cadetes.
Minutos antes, el michoacano hizo un recorrido por la base aeronaval del puerto de Veracruz, donde le mostraron los helicópteros MI-17, los más modernos con que cuenta la Marina y que son empleados en zonas de desastre, para el transporte de tropas, inserción y evacuación sobre tierra o agua, así como en prácticas de paracaidismo, operaciones de vigilancia, búsqueda, rescate, intercepción y ambulancia.
La Marina no se amedrenta
Durante la ceremonia, el secretario de Marina reiteró la lealtad de la institución hacia el Presidente de la República y declaró que no se amedrenta ante las amenazas por mayúsculas que éstas pretendan ser.
Se mostró elogioso con Calderón por la "sensibilidad" que ha demostrado, su percepción de los problemas y las causas que aquejan a la sociedad, así como por su visión y convicción de liderazgo para motivar y comprometer a todos los mexicanos en la solución de los problemas.
Reiteró el compromiso de la Armada de cumplir con su deber, aún más ante "intereses oscuros" que se contraponen al bien nacional o intentan vulnerar el esfuerzo de los mexicanos por vivir mejor.
Por ello, expuso que el narcotráfico, la delincuencia organizada y sus delitos son una amenaza a la seguridad y a los intereses nacionales y acorde con ellos debe ser la respuesta.