Saldó Caracas deuda con el Banco Mundial
Caracas, 14 de abril. El presidente venezolano, Hugo Chávez, anunció que su gobierno canceló la última cuota de la deuda que Venezuela tenía con el Banco Mundial. "Ayer pagamos la última cuota de la deuda (...) con el Banco Mundial (BM)", anunció el mandatario venezolano.
"Con este último pago (al BM), esa deuda que era en 1998 de casi 3 mil millones de dólares, les puedo decir hoy que no tenemos ni un centavo de deuda ni con el Fondo Monetario Internacional (FMI), ni con el BM", agregó.
Chávez manifestó su satisfacción por la cancelación de este compromiso y recordó que su gobierno ayudó a la "hermana República de Argentina" a pagar su deuda con el FMI.
Ayudamos a Argentina a librarse del FMI: Chávez
"Yo me siento muy contento de que Venezuela haya ayudado a Argentina, a liberarse del Fondo Monetario Internacional. Argentina ya no le debe nada al FMI, entre otras cosas, gracias al apoyo de Venezuela", señaló Chávez.
"Hemos convertido pues a Venezuela, de un país endeudado y amarrado que éramos, (...) en un modesto, pero importante país, y centro financiero de apoyo a otros países y a otros pueblos", agregó.
Chávez celebró un acto en los alrededores del palacio de gobierno para conmemorar el 13 de abril de 2002, fecha en que una "rebelión cívico militar" restituyó el orden constitucional en Venezuela, tras un golpe de Estado que lo expulsó del poder por 47 horas.
Venezuela canceló anticipadamente sus deudas con el Fondo Monetario Internacional y con el Banco Mundial, instituciones de Bretton Woods, lo que permitió al país ahorrar 8 millones de dólares, dijo este sábado a periodistas el ministro de Finanzas, Rodrigo Cabezas. "Señores del Fondo Monetario Internacional, señores del Banco Mundial, chao con ustedes, Venezuela es libre", dijo Cabezas.
La última cuota de la deuda con el BM, vencía en 2012. Con ello, el país se ahorró 8 millones de dólares, señaló Cabezas. Ahora "no tendremos que consultar con nadie las políticas económicas", agregó. Indicó que desde 1999 Venezuela adoptó la política de no contraer nuevos compromisos con el FMI o el BM, y cancelar los pendientes.