El sur de México es "muy poroso" y alienta cruces ilegales, según Washington
Gobernación y la embajada de EU afinan plan de seguridad fronteriza
La Secretaría de Gobernación y la embajada de Estados Unidos en México analizan los planes de seguridad fronterizos y enmiendas a las leyes migratorias que se promueven en ambos países.
De acuerdo con fuentes de Bucareli, la seguridad es un tema prioritario en la agenda bilateral, en particular cuando Washington busca, por medio de su vecino, que disminuya el paso de indocumentados provenientes de Centroamérica, principalmente.
En 2006 la Patrulla Fronteriza devolvió a 514 mil mexicanos (20 mil menos que el año anterior), mientras México deportó, ese mismo año, 182 mil 705 indocumentados (la mayoría ciudadanos de Guatemala, Honduras y Nicaragua), esto es, casi 60 mil menos que en el periodo anterior.
Este indicador llamó la atención del gobierno estadunidense como evidencia de que la línea fronteriza entre México y Guatemala sigue siendo muy porosa y por ello alienta un mayor tránsito de personas que buscan internarse a Estados Unidos sin los documentos necesarios para ello. De acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Migración, México consignó el año pasado a 2 mil 225 traficantes de indocumentados, conocidos como coyotes o polleros.
El embajador de Estados Unidos, Antonio Garza, acudió el miércoles pasado a Gobernación acompañado de una veintena de congresistas de su país, quienes llegaron a la dependencia -como medida de seguridad- a bordo de un autobús rentado por la representación estadunidense.
En la dependencia se dijo que la reunión tenía como propósito dar seguimiento a los compromisos bilaterales de los presidentes de México y Estados Unidos, impulsados el mes pasado en Mérida, Yucatán.
El encuentro se prolongó por una hora, aproximadamente, en el contexto de los planes del gobierno mexicano para modificar la normatividad en materia de población y descriminalizar la situación de los migrantes, pero también para impulsar un plan integral en la frontera sur, por donde cada año ingresan más de 400 mil indocumentados, la mayoría provenientes de Centroamérica, con la intención de llegar a Estados Unidos.
El mes pasado acudieron a Gobernación funcionarios del Departamento de Seguridad Interna del vecino país del norte, para analizar el particular.
Después del embajador Garza llegaron a Bucareli los integrantes del gabinete de seguridad mexicano. Cabe recordar que una ronda similar fue preámbulo del operativo para la entrega a Washington de varios capos del narcotráfico.
En tanto, Gobernación informó el fin de semana pasado de un proyecto de reforma a la política migratoria nacional, que incluye la ampliación de visa -hasta por cinco años- para los extranjeros que realicen actividades profesionales aquí, así como beneficios para las familias de aquellos indocumentados que sean admitidos como "refugiados".
La dependencia propone, además, ampliar los programas de jornaleros agrícolas guatemaltecos, trabajo temporal que registra, hasta ahora, cifras bajas. El año pasado sólo 40 mil ciudadanos del vecino país del sur resultaron beneficiados con ese plan.