Desde hace 4 años se aplica en el país nueva técnica quirúrgica, señala neurocirujano
25% de mexicanos, mal de la columna; avanza tratamiento de hernias de disco
Tarda unos cinco minutos y el paciente sale caminando por propio pie, en un par de horas
Una nueva técnica quirúrgica para la curación de las hernias discales y cervicales se aplica en México desde hace cuatro años. Con ella se resuelven los problemas que persisten a pesar del uso de medicamentos y se evita la cirugía común, de más alto riesgo, la cual, además, requiere un periodo más prolongado de recuperación. La nucleoplastia o coblación por radiofrecuencia se realiza en apenas cinco minutos y el paciente puede regresar a su casa dentro de las siguientes dos horas y por su propio pie, afirmó el neurocirujano Ernesto Martínez Duhart.
De acuerdo con el especialista, alrededor de 25 por ciento de los mexicanos presentan algún tipo de compresión en los discos de la columna y el cuello. Los primeros, frecuentemente por desconocimiento sobre la forma como se debe, por ejemplo, levantar objetos pesados. Lo común, dice, es que las personas utilicen su cuerpo como si fuera "una grúa", lo cual causa la mayoría de los daños a la espina dorsal. En el caso de las hernias cervicales (en el cuello), la mayoría se producen como resultado de accidentes.
En entrevista, Martínez Duhart destacó que la columna vertebral puede soportar objetos cuyo peso sea tres veces mayor al de la persona. Lo anterior siempre que se flexionen las rodillas antes de intentar alzar cualquier cosa. Cuando se pretende realizar esta acción doblando el cuerpo, la columna no podrá soportar ni el peso del propio individuo, indicó.
La nucleoplastia es eficaz en el tratamiento de las hernias centrales. Las vértebras están separadas por unos discos cartilaginosos y cada disco está formado por un anillo fibroso externo y una parte interna blanda, conocida como núcleo pulposo, que actúa como amortiguador durante el movimiento de las vértebras. Cuando un disco modifica su estructura (por envejecimiento o un accidente) su parte interna puede formar una protuberancia o de plano romperse. Es entonces cuando se forma la hernia discal. La parte interna del disco comprime o irrita la raíz nerviosa, e incluso puede lesionarla.
Cuando esto ocurre, el paciente reporta dolor en una o varias partes del cuerpo, trastornos sensitivos o debilidad. Con frecuencia, las hernias discales se presentan en la zona baja de la espalda (columna lumbar) y suelen afectar una pierna.
La nucleoplastia está indicada para las hernias que no se han roto y se mantienen dentro del anillo fibroso del disco, explicó Martínez Duhart. Este procedimiento clínico consiste en el uso de radiofrecuencia que genera calor durante ocho a 10 segundos, a través de electrodos que se introducen en el organismo mediante una aguja milimétrica hasta el punto donde se localiza el daño, en un proceso similar al de la endodoncia que se practica en la odontología.
El calor provoca que el anillo del disco recupere su forma y vuelva a su lugar. Martínez Duhart comentó que la mitad de las hernias discales son de tipo central, por lo que son susceptibles de someterse a esta terapia.
También dijo que alrededor de 30 por ciento de las compresiones discales se curan solas o mediante ejercicio físico, aunque las que no logran su remisión por esa vía o el uso de fármacos pueden llegar a ser incapacitantes y requieren de intervenciones quirúrgicas o técnicas como la nucleoplastia.
El especialista informó que el uso de la radiofrecuencia se ha dado desde hace unos 50 años para aliviar el dolor, y más recientemente se extendió para curar las hernias discales. Detalló que en México se utiliza de esta manera a partir de 2003, aproximadamente.