Contra el maquiavelismo
¿Quién teme al mercado libre?
Humor negro: los cárteles del narcotráfico comparten con Felipe Calderón una fe religiosa en el impacto mediático. Quieren convencer a la opinión pública de que el gobierno federal carece de fortaleza. Recurrirán a videos, mensajes con amenazas, advertencias y blogs en Internet. Le están dando una "sopa de su propio chocolate".
La derecha utiliza también los medios electrónicos para atacar, aislar y, si se puede, eliminar a sus adversarios. La propaganda negra contra Andrés Manuel López Obrador estuvo basada en mentiras y calumnias que hacían ver al candidato de la coalición Por el Bien de Todos como enemigo del libre mercado, de la modernización. Un nostálgico del echeverrismo, un émulo de Hugo Chávez.
La derecha no quiere competencia, ni mercado abierto, ni prosperidad para todos. No está de acuerdo con la sentencia de Adam Smith: "el mayor bien para el mayor número". Sus apoyos son los grandes grupos oligárquicos. Mientras se les permita seguir depredando estarán con el PAN. La oligarquía, como los señores feudales, casi no paga impuestos. Un conjunto de privilegios y exenciones les evita el peso tributario, que cae sobre los pobres y las clases medias, las empresas pequeñas y medianas.
AMLO propone abrir el mercado a la competencia y disminuir el poder de las oligarquías. Con la asesoría de Mario di Costanzo y Rogelio Ramírez de la O, ha propuesto dos proyectos que apuntan en ese sentido: una ley de precios competitivos y una reforma fiscal.
Esta última parte es la comprobación de que los grandes grupos pagan una tasa ridícula de impuestos, gracias a los regímenes de consolidación de pérdidas, de deducciones fiscales y de maniobras bursátiles. La propuesta consiste en eliminar estos mecanismos. La recaudación podría incrementarse en 200 mil millones de pesos. Si hubiera una estrategia de ahorro en el gobierno federal (austeridad burocrática) podría haber 100 mil más. Es una buena alternativa frente al impopular y regresivo impuesto al valor agregado para alimentos y medicinas.
Por otra parte, los organismos internacionales han insistido en la necesidad de reformar el sistema fiscal en México y atacar los monopolios privados y sindicales que impiden la competencia y la redistribución. Me sorprende que los ardientes defensores del mercado abierto no hayan dicho ni pío sobre las iniciativas de AMLO. El secretario de Hacienda, Agustín Carstens, se ha apresurado a prometer que no habrá este tipo de reformas.
La leyenda negra contra AMLO fue fabricada y alimentada con dinero de grandes grupos. López Obrador representaba la posibilidad de la reforma modernizadora, pero ellos viven y disfrutan de un verdadero paraíso y no quieren salir de él.