Blanco tuvo atenciones con los aficionados de las Aguilas
Queremos un buen partido, ganar a Pumas y sin violencia, expuso Tena
El técnico del América Luis Fernando Tena consideró que más allá de la rivalidad deportiva que existe con Pumas, sus jugadores están conscientes de la situación, por lo que este domingo "tenemos que hacer un buen partido si queremos ganar'' a la UNAM en su propio terreno.
Dijo que ambos equipos encaran el compromiso "en buen momento'' porque desean estar en la liguilla. "Nosotros lo estamos haciendo, pero primero hay que ganarles y luego veremos. Tenemos que ir paso a paso'', agregó.
El timonel resaltó la importancia del encuentro en el estadio Olímpico Universitario y lo que provoca entre los dos conjuntos tanto en el estado anímico de los jugadores como de su afición, todo lo contrario a lo que se vivió previo al clásico cuando le ganaron a Chivas hace dos semanas.
"Tenemos que estar muy concentrados y hacer que nuestros jugadores lo estén también porque son periodos diferentes. Es Semana Santa, pero los muchachos son los primeros en saber la rivalidad. Ellos han tenido muchos partidos contra Pumas y sabemos bien todo lo que significa esto.
"El ambiente (que viven) es parecido contra el Guadalajara, Cruz Azul y Pumas, son los tres partidos que nuestra afición valora más'', puntualizó el entrenador de Coapa, quien pidió prudencia y cordura a los seguidores amarillos para no provocar desmanes en el juego del domingo.
"Que lo disfruten, lo sientan, pero que no nos pasemos; que (el futbol) es un deporte, así que hay que vibrar, pero no pensar en una violencia ni cosas mayores'', anotó Tena, quien salió por la puerta dos para repartir autógrafos y posar para la foto con algunos aficionados que esperaron más de tres horas para compartir fugaces momentos con los jugadores que detenían sus autos sin hacer declaraciones a la prensa.
Fue entonces cuando el BMW plateado de Cuauhtémoc Blanco se asomó por la puerta principal, pero la gente le cerró el paso y debió dar marcha atrás.
Al grito de "¡Cuauhtémoc, Cuauhtémoc, Cuauhtémoc!'', la muchedumbre comenzó a empujarse y a golpear el portón y para evitar algún incidente, por lo que el jugador decidió que los aficionados ingresaran a las instalaciones para atenderlos personalmente, pero sólo a ellos.
Inclusive le presentaron a un niño de año y tres meses que tiene su nombre y apellido, pero es hijo de la familia García Martínez según el acta de nacimiento en la que depositó su firma.