Protestan contra la decisión de la empresa de suspender el rescate de los cuerpos
Deudos de mineros muertos en Pasta de Conchos realizan plantón en Coahuila
La compañía busca ocultar pruebas de su negligencia, afirman familiares de los fallecidos
Desestiman el argumento sobre riesgo de contaminación bacteriológica en el yacimiento
Ampliar la imagen En la imagen, correspondiente al 18 de marzo de 2006, aparece un integrante de una cuadrilla que en esa fecha laboraba en el rescate -inconcluso hasta la fecha- de los mineros que murieron atrapados en el yacimiento de Pasta de Conchos Foto: María Meléndrez
Saltillo, Coah., 5 de abril. Aproximadamente 80 familiares de mineros que murieron en Pasta de Conchos mantienen un plantón afuera de las oficinas generales que la concesionaria del yacimiento, Industrial Minera México, Sociedad Anónima (IMMSA), tiene en Nueva Rosita, Coahuila.
Lo anterior en protesta por la decisión de la compañía, filial de Grupo México de suspender la búsqueda y rescate de 63 cadáveres que permanecen sepultados en el yacimiento, que explotó y colpasó el 19 de febrero del año pasado. Los manifestantes permitieron hoy la entrada y salida de trabajadores y directivos. Sin embargo, advirtieron que permanecerán en el lugar hasta que Minera México decida reiniciar la búsqueda de los restos de sus familiares y amigos.
Enrique Valverde Durán, representante general de IMMSA, intentó convencer a los deudos de levantar la protesta. Les dijo que si las operaciones no se hubieran detenido el miércoles anterior se habría arriesgado la vida de más personas.
Les aseguró que la suspensión de los trabajos no es definitiva y que la decisión se mantendrá hasta que disminuyan las concentraciones de gas metano en la cantera.
Sin embargo, las familias consideran que Minera México no reabrirá la carbonera para frenar la posibilidad de que tanto la Procuraduría General de Justicia del estado como la General de la República encuentren más evidencias sobre las causas de la explosión y los derrumbes que mataron a 65 mineros.
La empresa dijo a las familias que las brigadas de búsqueda de los cuerpos no van a reanudar labores hasta que Daniel Wooton, presunto experto en seguridad en minas, determine si existen o no riesgos bacteriológicos ocasionados por la contaminación del agua en la mina.
Guillermo Iglesias, ingeniero en minería e hijo de uno de los trabajadores que murieron, cuyos restos permanecen enterrados en la mina, desestimó los argumentos de IMMSA para suspender los trabajos de rescate.
"El gas en exceso que dicen hay dentro de la mina lo pueden sacar a través de los pozos de ventilación que hicieron, y lo del agua contaminada no se ha podido precisar. De hecho, es posible que ni agua haya en el yacimiento", anotó.