Café jarocho tradicional
La Parroquia, en breve en el DF
En unos meses, uno de los pretextos para visitar el puerto de Veracruz -como tomar café de La Parroquia- podrá cumplirse en pleno Distrito Federal.
Marcelino Fernández Rivero, director del grupo comercial poseedor del establecimiento porteño, informó que abrirá una sucursal en algún punto del sur de la ciudad -el cual no quiso precisar aún.
Michas lecheros, huevos tirados y demás especialidades del histórico y emblemático café jarocho podrán disfrutarse en la ciudad de México, aunque seguramente hará falta el bullicio que inunda el negocio original, que ya cuenta con franquicias en Orizaba y Villahermosa, además de una sucursal en Boca del Río.
Cuenta la leyenda que la historia de La Parroquia se remonta al siglo XIX (1863), aunque Fernández Rivero acota que Sebastián Lerdo de Tejada antes ya había reconocido la existencia de una confitería con tal nombre.
Por muchos tiempo el café estuvo en la calle Independencia -en la acera que va de Gutiérrez Zamora a Mario Molina-, pero un diferendo familiar obligó a cambiarlo frente a los muelles, en 1994.
La tradición del golpeteo
El establecimiento ha estado en manos de la familia Fernández a partir de 1926, cuando el santanderino José Fernández Fernández -quien llegó a "hacer la América" dos años antes- le compró a una familia González, de Tehuacán, Puebla, el ya para entonces célebre sitio donde esta bebida se pide con leves golpecillos de la cuchara en el vaso, modalidad impuesta por un operador de tranvías abiertos que hacía sonar la campana para solicitar un café, sin bajarse de su pesado vehículo.
Hace pocos años, el consumo del aromático creció de forma notable, cuando estableció diversos puntos de expedición en una cadena de papelerías que en diez días logró vender 900 kilos. El grano cuenta con certificado de denominación de origen y actualmente se expende en paquetes que contienen una válvula que garantiza su frescura.
Fernández Rivero, quien se confiesa enamorado de la competencia, asegura que por ahora la tradición de La Parroquia se enfocará más hacia la venta de comida.