Es light, señalan legisladores del sol azteca sobre la ley antidiego
Defiende el blanquiazul reforma contra el tráfico de influencias
La fracción del Partido Acción Nacional (PAN) en el Senado de la República salió en defensa de la reforma que crea un régimen de incompatibilidades entre los legisladores, conocida como ley antidiego, al asegurar, a través del vicecoordinador blanquiazul, Humberto Aguilar Coronado, que evitará los conflictos de intereses en el Congreso, así como el tráfico de influencias.
Contra la versión de legisladores perredistas de que se trata de una reforma constitucional ''light'', muy limitada en relación con la iniciativa original que la bancada perredista presentó en octubre del año pasado, el panista sostuvo que se prohíbe expresamente que senadores y diputados federales litiguen contra el Estado.
''En ningún caso podrán representar, por sí mismos o por algún intermediario, intereses patrimoniales de terceros frente a los de cualquier ente o persona moral de derecho público, salvo en defensa de sus propios derechos, de los del gremio al que pertenece o del partido político del que forme parte'', se precisa, detalló, en la iniciativa que se presentará al pleno senatorial en primera lectura el martes próximo.
Se trata de una propuesta que la propia bancada panista formuló a fin de terminar con las críticas a Diego Fernández de Cevallos, quien combinó durante sus seis años como senador la tarea legislativa con la de litigante, lo que le dejó grandes ganancias, a excepción del controvertido juicio en contra de la Secretaría de la Reforma Agraria (SRA) en el que, luego del escándalo suscitado y de la resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), ya no pudo cobrar los mil 200 millones de pesos que había logrado para sus clientes.
Despachos incómodos
La iniciativa panista se presentó en octubre de 2006, con la pretensión de que los senadores y diputados se dedicaran exclusivamente a legislar, pero generó protestas dentro de los propios blanquiazules, sobre todo los que tienen negocios o despachos de abogados. Debido a ello tuvo varios cambios.
Sin embargo, Aguilar Coronado aseguró que la reforma propicia la transparencia en el Congreso de la Unión, ya que una de sus principales aportaciones es fijar con toda claridad las incompatibilidades existentes con la función legislativa, y cuáles son los casos de excepción en que podrán actuar o litigar alguna causa. Con ello se impide a senadores y diputados intervenir en asuntos en los que haya conflicto de intereses.
El tráfico de influencias se acotó también, ya que la reforma prohíbe a los legisladores solicitar o recibir dinero u otras prebendas a cambio de orientar en algún sentido su voto en proyectos que se discutan en el Congreso.
Finalmente, el legislador indicó que tampoco podrán aprovecharse de su posición para influir en acciones u omisiones de funcionarios.