Faltantes en el volumen de producción
Pemex-Refinación, organismo subsidiario de la petrolera mexicana, mostró inconsistencias entre los volúmenes de venta de los productos petrolíferos y la producción de 2005, lo que representó un impacto económico negativo por poco más de 312 millones de pesos.
La Auditoría Superior de la Federación (ASF) determinó revisar un volumen de 535 millones de barriles, que representó ciento por ciento del volumen vendido, conforme con la facturación emitida por la subdirección comercial.
Esta auditoría se seleccionó porque en los resultados de las revisiones de la Cuenta Pública 2004, se determinó la falta de control en el registro de los volúmenes producidos y movilizados para su venta; "asimismo, porque la entidad fiscalizada (Pemex-Refinación) tiene pendientes de atender acciones formuladas por la ASF en dichas auditorías".
Entre los resultados que obtuvo el órgano fiscalizador del Congreso se detectaron adeudos pendientes de cobro por 192.5 millones de pesos de clientes de gobierno provenientes de ejercicio anteriores, "sin evidencia documental de acciones para su recuperación".
Adicionalmente se identificaron saldos pendientes de cobro por 119.6 millones de pesos a "otros clientes", de los cuales se carece de la evidencia documental que sustente los derechos de cobro.
Además se encontró una diferencia de un millón 487 mil barriles del volumen total vendido entre lo reportado en el Sistema Integral de Información Comercial (618.1 millones de barriles) de la Subdirección de Finanzas y Administración y el Sistema de Transferencia de Custodia (616.6 millones de barriles) de la subdirección de Almacenamiento y Distribución, entre otras inconsistencias.
La ASF revela que el impacto de la fiscalización tiene un costo económico por 312.1 millones de pesos, que corresponden a la cuantificación monetaria de lo observado, los cuales se consideran como recuperaciones probables