Rinden homenaje en el encuentro fílmico jalisciense

Otorgan a Vicente Leñero el Mayahuel de Plata

ARTURO CRUZ BARCENAS ENVIADO

Guadalajara, 27 de marzo. Vicente Leñero recibió la noche del lunes el Mayahuel de Plata como homenaje del 22 Festival Internacional de Cine en Guadalajara, en una larga jornada en la que el autor de Los periodistas se reunió con la comunidad cinematográfica nacional e internacional que asiste a esta ciudad a la máxima actividad en su tipo en el país; leyó un texto en el Paraninfo de la Universidad de Guadalajara, donde se presentó el libro biográfico escrito por Gerardo de la Torre, y acudió al teatro Diana, donde se proyectó la película El violín, de Francisco Vargas, y recibió el citado trofeo.

Con el Mayahuel en sus manos, dijo que la vida tiene un guión invisible, no determinado, que cada quien va escribiendo. "El espectador sólo tiene que dejarse llevar por la vida. El escritor de cine no tiene más remedio que escribir de esta vida. ¡Tremenda responsabilidad! ¡Dificultosa elección! Como si él mismo fuera un espectador de lo que está escribiendo".

Destacó la importancia del oficio de escritor de guiones. "Agradezco este Mayahuel que recibo emocionado, en esta Guadalajara donde nací". Y volvió a pronunciar el nombre de su "Estela amada" su esposa, de sus hijas Estela, Isabel, Eugenia y Mariana -a quien regaló el trofeo por ser su cumpleaños-. A sus nietas y a sus nietos. El aplauso fue sonoro. Un cierre de oro para los Leñero.

Emocionado, agradeció el homenaje que se le tributó en el Paraninfo, donde, al llegar, se le ofreció un aplauso colectivo, de pie, desde el presídium: del actor Pedro Armendáriz, Jorge Sánchez Sosa, director del festival; el escritor Guillermo Arriaga, y Raúl Vargas, vicerrector de la UdeG.

Presentan libro

Armendáriz asistió en lugar de Gerardo de la Torre, autor del libro homenaje editado por la UdeG que se presentó durante el acto. El autor no pudo asistir porque "tiene un problema cutáneo", se argumentó.

El actor dijo: "Vicente ha sido un encaminador del periodismo documental, del periodismo de los ensayos, de la novela, pero, sobre todo, en México en los pasados 50 años, no ha habido un guión en el que no haya puesto una coma, un signo de interrogación, o un tachón. En todos los guiones ha participado.

Tomó la palabra Guillermo Arriaga, quien definió a Leñero como "el ejemplo de todos los que nos dedicamos a la literatura o al cine. Es un escritor, en toda la extensión de la palabra".

Leñero leyó unas palabras que escribió para la ocasión: "Ante una situación como la de hoy uno tiene dos posibilidades: la de tirarse al piso y enumerar los odios y merecimientos, o levantar la cara, sacudir la vanidad y asumir la fiesta como un acto de justicia. Las dos posibilidades son malas. Habría que buscar la tercera, que alude no sólo a la generosidad del festival de Guadalajara, de mi querido Jorge Sánchez, a la cabeza, sino al hecho de encomiar por medio de un escritor de cine el fenómeno en sí del guionismo cinematográfico, clave en sí de la elaboración de toda película. Ser guionista significa ser un cineasta especializado".