Hoy decidirán en la Comisión de Economía de San Lázaro sobre minuta del Senado
Intentan PAN y PRI vetar iniciativa contra alimentos chatarra, acusa PRD
Hubo intenso cabildeo para impedir la prohibición de anunciarse en radio y tv: diputados del sol azteca
Ampliar la imagen Alumnas de una telesecundaria en Ciudad Nezahualcóyotl, estado de México, durante la hora del recreo Foto: Roberto García Ortiz
El intenso cabildeo de empresas que producen alimentos chatarra en México arrojó resultados favorables a su causa en la Cámara de Diputados, donde ahora el PAN y el PRI pretenden rechazar la minuta enviada por el Senado para que dichos productos y bebidas se ajusten a la prohibición de anunciarse en televisión y radio.
La restricción a la publicidad de los alimentos chatarra implicaría cambios en los artículos 115 de la Ley General de Salud y 49 de la Ley Federal de Protección al Consumidor. El argumento para aprobar esas reformas legales radica en que México se ha convertido en el segundo país del mundo con mayor número de obesos, y una de las causas más importantes de ese padecimiento se encuentra en la ingesta excesiva de tales artículos.
Alejandro Sánchez Camacho, coordinador económico del grupo parlamentario del PRD, y sus compañeros Octavio Martínez Vargas y Salvador Ruiz Sánchez, denunciaron que el PRI y el PAN en la Comisión de Economía pretenden mayoritear la votación con la finalidad de desechar la minuta enviada por el Senado.
La propuesta, de origen panista
A finales de la legislatura pasada, el panista José Antonio del Sagrado Corazón Haghenbeck presentó en el Senado la iniciativa de reforma a las citadas leyes porque en México el excesivo bombardeo publicitario en los medios de comunicación electrónica ha incrementado sustancialmente el consumo de alimentos chatarra. Esos productos tienen un bajo valor nutricional y un alto contenido energético, y su ingesta provoca permanentemente que se agrave el problema de sobrepeso y obesidad, principalmente en las zonas urbanas.
El Senado aprobó la iniciativa que obligaba a la Secretaría de Salud a promover investigaciones sobre los efectos del consumo de productos con bajo contenido nutricional y alto contenido energético, y se impedía emprender acciones, ofertas y promocionales de los mismos en los medios de comunicación.
Una vez que fue aprobado por el pleno, el dictamen se envió como minuta a la Cámara de Diputados, donde, a partir del mes de mayo de 2006 se instrumentó una estrategia disuasiva por parte del Consejo Mexicano de la Industria de Productos de Consumo con objeto de convencer a los diputados federales de que la aprobación referida provocaría enormes pérdidas a las empresas productoras de alimentos chatarra.
Argumentaron que se pondría en riesgo, sobre todo, la planta laboral de las mismas, no obstante que con el tiempo se demostró que no ocupan, en conjunto, más allá de 5 por ciento del total de trabajadores contratados por la industria alimenticia del país.
Aun así, Barcel, Bimbo, Coca-Cola de México, Grupo Gamesa, Grupo Jumex, Jugos del Valle, Kellogs de México, Nestlé-México, Pepsi de México, Sabritas, Sara Lee Branded, Sigma Alimentos Corporativo, entre otros, replicaron a la acción del Senado: "Externamos nuestra profunda preocupación por las reformas contenidas en la minuta, debido a que éstas desconocen las importantes acciones que ha venido realizando la industria de alimentos y bebidas, en colaboración con las autoridades de salud, para atender estos retos. Asimismo, nos preocupa el hecho de que, al aprobar estas reformas, se estaría privilegiando la imposición de medidas intervencionistas y no el diálogo con la industria, que en reiteradas ocasiones ha manifestado su total disposición para colaborar en la solución de estos problemas".
Al justificar el incremento de los niveles de obesidad en el país, los empresarios señalan que la misma es resultado de un desequilibrio energético, en el que un individuo ingiere más energía que la que gasta durante un periodo prolongado; "los hábitos alimentarios y la realización de la actividad física dependen de una gran variedad de factores, que incluyen la planeación urbana, la inseguridad, el aumento en la participación de las mujeres en el mercado laboral y la adopción de conductas cada vez más sedentarias".
De tal forma, las presiones del Consejo Mexicano de la Industria de Productos de Consumo causaron efecto, y a éste se sumó la presión de las televisoras, que serían igualmente afectadas en sus ingresos por la promoción de los alimentos chatarra.
Por lo tanto, los diputados del PAN y del PRI, denunció Alejandro Sánchez Camacho, pretenden que la Comisión de Economía rechace la minuta con proyecto de decreto que reforma las leyes General de Salud y la Federal de Protección al Consumidor durante la reunión que sostendrá este miércoles por la mañana.
El legislador perredista dio a conocer que su partido respalda el texto, tal y como se aprobó en el Senado, porque "la idea central del dictamen es prohibir que en los medios de comunicación se difundan los alimentos chatarra, como una manera de prevención de salud pública".
Su compañero Octavio Martínez recordó que la minuta se discutió desde hace 60 días en el seno de la Comisión de Economía, pero fue sacada del orden del día porque entonces no había condiciones para ser rechazada por el PAN y el PRI. Ahora se espera que ambos partidos actúen de nueva cuenta en mancuerna y echen atrás la minuta, a raíz de la presión sostenida de los productores de alimentos chatarra.