Critica el Papa a la Unión Europea
Ciudada del Vaticano, 25 de marzo. El papa Benedicto XVI manifestó, en palabras que coincidieron con la celebración del 50 aniversario de la Unión Europea (UE), que una sociedad que carece de conciencia cristiana acabará en "bancarrota".
El pontífice hizo duras críticas a la UE porque no se mencionó a Dios y ni las raíces cristianas de Europa en las declaraciones por la conmemoración de la fundación del bloque.
"Una sociedad en la que no existe conciencia cristiana pierde la dirección, ya no sabe hacia dónde ir, acaba vacía y en bancarrota", expresó este domingo.
Se necesita conciencia cristiana para promover la justicia y un sentido de responsabilidad entre las personas, agregó.
Los comentarios coincidieron con la celebración del 50 aniversario del proceso de creación de la Unión Europea, en una ceremonia en la que se dio a conocer la Declaración de Berlín, documento que no hizo menciones a la religión ni a las raíces cristianas del continente.
El Papa, como su predecesor Juan Pablo II, a menudo hace llamados para que se incluya a Dios y el cristianismo en la constitución europea.
Benedicto XVI ha recibido el apoyo de líderes de la UE, como la canciller alemana Angela Merkel, quien presentó la declaración el domingo, así como del primer ministro italiano Romano Prodi.
Prodi señaló a periodistas que había luchado sin éxito por la inclusión de las raíces cristianas en una enmienda que esperaba fuera aceptada por naciones como Francia, que históricamente se han opuesto a la medida.
Pero las posturas sobre el asunto no han cambiado, y es poco probable que eso ocurra en el futuro, indicó.
Merkel se mostró igualmente pesimista respecto de la posibilidad de que alguna referencia fuera incluida en el nuevo tratado, pero aseveró que a la gente debería permitírsele expresar su opinión sobre el asunto.
"Cuál será el resultado, no lo puedo decir", declaró Merkel, quien es hija de un pastor protestante. "Soy realista, y eso significa que no soy optimista", agregó.
En su duro discurso del sábado, el Papa dijo que al excluir los valores que ayudaron a forjar su alma, Europa estaba cometiendo una forma de apostasía.