Obligado a aportar soluciones y conservar la confianza de los mexicanos, señala
Demanda Calderón al panismo actuar corresponsablemente con su gobierno
Para el partido, razón de Estado el respaldo al Presidente, expresa Manuel Espino
Ampliar la imagen Al concluir la sesión de Consejo Nacional, Manuel Espino, dirigente del PAN, intenta un abrazo con el presidente Felipe Calderón Foto: José Antonio López
El PAN caminó de la confrontación al aparente respaldo al gobierno federal, luego que el dirigente Manuel Espino consideró un "deber de Estado" apoyar al Presidente de México, surgido de las filas panistas. Por su lado, Felipe Calderón no sólo pidió al partido actuar de manera corresponsable con su administración, sino que además tiró línea sobre las acciones a seguir para que esté a la altura de los retos del país, aporte soluciones responsables a los problemas nacionales y conserve la confianza de los mexicanos.
En su primer encuentro, como jefe del Ejecutivo, con los integrantes del Consejo Nacional del PAN, el michoacano dijo que Acción Nacional debe contar con los mejores candidatos y abrirse a nuevos militantes. Eso sí, no se trata de reclutar por reclutar, ni tampoco de aplicar la lógica del rebaño, de la horda o de la academia, enfatizó.
Consideró necesario que el PAN se imponga la premisa de tener siempre los mejores militantes, dirigentes, candidatos y ciudadanos, luego de advertir que la tarea tiene su complejidad y que siempre es más "fácil reclutar rebaños que terminan por ser crianza de cuervos".
Felipe Calderón inició su discurso con el señalamiento de que su partido enfrenta desafíos derivados de los nuevos tiempos, entre los que señaló la criminalidad y la corrupción que amenazan al Estado.
Ante un mundo distinto, expuso, el panismo tiene que estar a la altura de los retos de nuestro tiempo y eso implica dar soluciones con responsabilidad a los distintos problemas. Para lograr dichos objetivos, el PAN debe ser el mejor partido, no sólo por conveniencia política o electoral, sino por verdadera obligación ética con el pueblo de México, subrayó.
Ante más de 300 consejeros nacionales, expuso que ser el mejor partido significa, en primer lugar, tener las mejores ideas, principios y propuestas. Acción Nacional las tiene. Pero el reto es hacer que no se queden en entelequias, sino en alternativas y soluciones de vida diaria.
Felipe Calderón dijo ser respetuoso de todas y cada una de las fuerzas políticas del país, pero enseguida aludió a su larga militancia en el blanquiazul, para referirse a los desafíos que enfrenta el PAN.
Sobre la propuesta de postular a los mejores candidatos a puestos de elección popular, refirió que esa debe ser una práctica sin excepción en todas y cada una de las elecciones. Contar con los mejores aspirantes debe ser la consigna; el santo y seña, subrayó.
También agregó que el PAN requiere de los mejores militantes y dirigentes en toda la nación, para luego señalar que millones de mexicanos despertaron abruptamente a la vida nacional en el dramatismo vivido en la pasada campaña electoral. Ahora esas personas necesitan un espacio para ejercer con plenitud su ciudadanía ganada a pulso el 2 de julio de 2006, y ese espacio debe ser Acción Nacional, sostuvo.
Consideró que su partido no puede tener miedo de renovar sus cuadros con los mejores mexicanos, ni tampoco negarse a reclutar militancia de calidad. Eso sí, reconoció la complejidad de la tarea y que siempre será más fácil cerrar las puertas y bloquear a estas personas por el miedo a lo que venga o a la pérdida del poder y el liderazgo propio.
Buscar al ciudadano probo y sin tacha será siempre más difícil que reclutar al negociante o al aventurero. No es fácil, pero es el mejor camino, insistió.
Acompañado de su esposa Margarita Zavala -quien antes de la reunión del Consejo Nacional recibió un reconocimiento a su trayectoria política por parte de mujeres panistas-, Felipe Calderón insistió a sus correligionarios que los resultados del sexenio dependerán del trabajo conjunto entre partido y gobierno.
Los ciudadanos nos han elegido a ustedes y a mí; tenemos la corresponsabilidad de dirigir el país, en medio precisamente de un mar embravecido y llevarlo a buen puerto, enfatizó.
Hizo luego un reconocimiento a todo el panismo por su apoyo y por traducir dicho respaldo en cercanía, diálogo, entendimiento y trabajo político, particularmente en el Congreso. Las reformas que aún hacen falta deben ser discutidas severamente e impulsadas por diputados y senadores para constituir, partido y gobierno, un verdadero motor del cambio nacional.
Respaldo por razones de Estado
Previamente, el dirigente nacional del blanquiazul dijo que "los panistas no sólo nos reconocemos corresponsables de la acción de gobierno", sino que "hemos sido congruentes con esa responsabilidad y hemos apoyado a nuestros gobiernos, porque ese es nuestro deber principal. Los hechos están ahí, aunque la perversidad de quienes quieren confrontarnos digan lo contrario".
Símbolo de estos hechos es la valiente defensa de la legalidad que hicieron los legisladores del PAN el 1º de diciembre, y la coordinación permanente entre la dirigencia nacional y el gobierno federal, explicó.
Manuel Espino destacó que el apoyo se ha dado y se seguirá dando, no sólo por solidaridad o por afinidad, sino porque reconocemos que en la conducción del país, para Acción Nacional es un deber de Estado respaldar al presidente de México surgido de nuestras filas.
En aras de un mejor orden nacional, agregó que el PAN caminará hombro con hombro con sus gobiernos, para consolidar la democracia. "Cuente con los alcaldes, gobernadores, legisladores, militantes y dirigentes de su partido", ofreció al presidente Felipe Calderón, para luego señalar que en un espíritu de colaboración respetuosa, los panistas subordinaremos nuestros "propios episodios al destino. Comenzando por el de la voz, lo acompañaremos con lealtad y patriotismo hasta el último día de su mandato", concluyó.
Los discursos del jefe del Ejecutivo y del presidente del PAN ocurrieron al iniciarse los trabajos del Consejo Nacional, donde se aprobó el presupuesto para 2007, el cual será superior al del año pasado en 180 millones de pesos, para ubicarse en 742 millones.
Se acordó que el PAN no tramitará ningún nuevo crédito y que en este año se avanzará en el pago de su deuda, que asciende a 200 millones de pesos. Además, se decidió asignar mayores recursos a los comités estatales, siempre que haya un programa de trabajo.