Defiende la inversión pública y privada, nacional o externa
Elogia Calderón patriotismo de reformadores del ISSSTE
Acompañado por el góber precioso en Puebla, encomia la valentía de legisladores de PAN, PRI, PVEM, PASC y Panal
Palmar de Bravo, Pue., 23 de marzo. El presidente Felipe Calderón elogió el "patriotismo" de los diputados de PAN, PRI, PVEM, PASC y Panal por haber aprobado los cambios a la Ley del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), y anunció que va por más reformas, porque si bien la economía del país "sigue creciendo pujantemente", no lo hace al ritmo que se necesita.
De gira por esta entidad, acompañado por el góber precioso Mario Marín, el mandatario estaba de plácemes por la decisión de dichos legisladores en San Lázaro, y hasta mencionó los nombres de sus partidos; dijo esperar que, en su momento, los senadores deliberen el tema "con responsabilidad".
Una vez que la reforma del ISSSTE salió adelante en la Cámara de Diputados con el mayoriteo de los partidos mencionados, Calderón se animó más para insistir en que quiere trabajar "en equipo" con otros órdenes de gobierno y con los partidos, "por encima de nuestras diferencias", para hacer un México "más digno".
Inaugura planta de cemento
En esta visita, que fue exclusivamente para inaugurar la cuarta planta de cemento de la Cooperativa Cruz Azul en el país, defendió su bandera de que la sociedad es "la fuente más viva" de generación de empleos, no el gobierno, al que le toca -dijo- sólo generar un clima propicio para la inversión.
El Presidente llegó a estas instalaciones, que producirán tres toneladas de cemento al día, con el jefe de la Oficina de la Presidencia, Juan Camilo Mouriño, y con Carlos Hermosillo, titular de la Conade y ex jugador del equipo de futbol Cruz Azul.
Tras poner en marcha esta planta, que tuvo un costo de 350 millones de dólares, el Ejecutivo federal se trasladó al almacén de paletizado de cemento, donde estuvo en el podio al lado del gobernador poblano.
En su segunda visita a Puebla, el michoacano dio un trato frío al mandatario priísta, famoso por sus conversaciones con el empresario de la mezclilla Kamel Nacif. En su discurso, Calderón reconoció a todos, menos al poblano, quien tampoco se esforzó mucho por elogiar al Presidente; de hecho, sólo le insistió que espera su apoyo.
Lo que Calderón sí reconoció fue "el valor" de los legisladores por haber aprobado una reforma que calificó de trascendental, no sólo porque va a salvar al ISSSTE de la quiebra, sino también porque dará viabilidad financiera al país.
"Quiero reconocer en especial la labor de los coordinadores parlamentarios del Partido Acción Nacional, del Partido Revolucionario Institucional, del Partido Verde, del Partido Nueva Alianza, del Partido Socialdemócrata y de todos los integrantes de estas fracciones parlamentarias, porque sé que es muy difícil tomar decisiones importantes para el país, y las han asumido con valentía", expresó contento.
Y como los diputados de PRD, PT y Convergencia no aprobaron la reforma del instituto, el Presidente los excluyó de sus felicitaciones.
Para romper la rigidez del acto, en el que había cientos de trabajadores de las plantas de Aguascalientes, Oaxaca e Hidalgo, se declaró admirador de La Máquina, porque lleva sus "colores favoritos", es decir: el azul y el blanco del panismo.
Aunque como seguidor del equipo Morelia, dijo que lo único que no logra asimilar es que el Cruz Azul le haya ganado a los Monarcas.
"Pero los felicito, además, porque están de superlíderes, y eso es algo que corresponde a la casta y a la dedicación que siempre debe tener la Cooperativa Cruz Azul", decía sonriente.
De pasó, envió un saludo a Oscar El Conejo Pérez, el portero del equipo cruzazulino, quien en la campaña presidencial hiciera comerciales en favor de Calderón. "Seguramente ha de estar concentrado, ¿verdad?", agregó, y con ello logró que algunos asistentes sonrieran.
Luego volvió a su discurso optimista de un día antes; declaró que no obstante que Estados Unidos está creciendo más lento y algunas bolsas de valores del mundo han caído, México "sigue creciendo pujantemente".
Pero de inmediato matizó sus palabras, y reconoció que este crecimiento no se da al ritmo que necesita el país, con lo que aprovechó para machacar en la necesidad de aprobar reformas que hagan más competitiva la economía de México.
Según el mandatario, el país tiene todo para ser ganador, sólo que antes necesita crear suficientes empleos, y la "única palabra" que lo puede hacer es la "inversión, pública y privada, inversión nacional y no nacional".
Así, con un llamado en pro de las reformas estructurales y haciendo una defensa del capital privado y extranjero, el mandatario cerró su última gira de la semana.