Presentaron La huelga del Río Blanco, libro coordinado por Bernardo García Díaz

Llaman a recuperar la memoria ante ''la ofensiva del capital''

Se cumplen 100 años de esa gesta poco estudiada, de la cual surgió nuestro proletariado industrial

El neoliberalismo mutila los contratos para acotar las conquistas laborales, deplora el historiador

ERICKA MONTAÑO GARFIAS

En los movimientos obreros nada se conquista para siempre, por eso no se pueden detener y deben encontrar la forma de seguir adelante y evitar que el capital gane terreno, señala el historiador Bernardo García Díaz, coordinador del libro La huelga del Río Blanco, publicado al cumplirse cien años del movimiento obrero textil que propició el nacimiento de una nueva clase social en México: el proletariado industrial.

''Queremos que esta fecha no caiga en el olvido, sino por el contrario, que el público del nuevo siglo tenga una relación fundamentada y seria con los acontecimientos de esos días del año 1907 y el contexto en el que se dieron. Desde muy temprano esta efeméride se convirtió en un mito social, es decir, es un hecho histórico más mencionado e invocado que verdaderamente conocido y menos aún comprendido en su real acontecer y en el sentido que adquiere en su época.

''La ignorancia, el desconocimiento de los hechos se ahonda posteriormente debido al desinterés manifiesto en las décadas recientes por la historia obrera y sus luchas propiciadas no en poca medida por el descrédito en el que ha caído buena parte del sindicalismo mexicano ante la opinión pública, así como por la indiferencia que muestra la mayoría", agrega García Díaz.

Con la huelga de Río Blanco, en la que cientos de obreros murieron, fueron heridos o detenidos, se iniciaron las conquistas de la clase obrera, el movimiento pronto se extendió por Veracruz y por todo el país, logrando beneficios como el salario mínimo o el derecho a huelga.

''Fue un elemento fundamental para catalizar un movimiento muy fuerte, cuyas conquistas han sido acotadas por el neoliberalismo que mutila los contratos, en algunos casos ya no se pagan horas extras, no hay antigüedad, lo cual te indica que el movimiento no puede parar, sino que siempre tiene que ir adelante, porque de lo contrario el capital le gana terreno."

Nada fue gratuito

Ahora muchas de esas conquistas, añade el investigador García Díaz, ''no sólo hay que defenderlas sino que hay que ir más adelante. En realidad, el movimiento obrero no las tiene todas consigo, sino todo lo contrario, por eso creo que es muy importante la recuperación de la memoria, recordar que nada fue gratuito, que esas cosas se lograron no por un favor del Estado ni de los empresarios, sino que fue a partir de luchas muy duras y no sólo en México, sino en todo el mundo.

''Estas conquistas laborales han sido resultado de luchas bastante fuertes, violentas y a veces hasta sangrientas."

Es importante recuperar esa memoria de la lucha obrera, sobre todo ahora que existe la tendencia a criminalizar los movimientos sociales, como si nunca hubieran surgido en este país, no se dan cuenta que mucha de nuestra historia no es sólo la del desarrollo económico sino también la de los movimientos sociales que definen y han definido el perfil del país, subraya el coordinador del texto, en el que se incluyen ensayos de los historiadores Leticia Gamboa, Rodney D. Anderson, Aurora Gómez Galvarriato, Jean-Pierre Bastian y Moisés González Navarro, y del mismo Bernardo García Díaz, con prólogo de John Womak Jr.

Difíciles condiciones de trabajo

En la actualidad, añade García Díaz, existe una ofensiva del capital que obliga y obligará a los trabajadores a actuar, aunque en un contexto cada vez más difícil, promovido en parte por los medios de comunicación, que en el momento en que se da un movimiento social, un movimiento sindical, en seguida dicen que tiene un sentido político, que está politizado, y no están viendo que hay una serie de condiciones ddifíciles de trabajo.

La huelga del Río Blanco, libro coeditado por la Universidad Veracruzana (UV) y el gobierno de ese estado, por conducto de la Comisión Estatal del Bicentenario de la Independencia y el Centenario de la Revolución Mexicana, se presentó ayer en La Casa del Poeta.