Calderón debe centrarse en atacar el origen de ese fenómeno social, sostiene
La reforma migratoria que ofreció Bush es "pura faramalla": AMLO
La solución a la crisis de Oaxaca pasa por la renuncia de Ulises Ruiz Ortiz, afirma
Ampliar la imagen José Antonio Piñón Martínez, director del Centro de Integración Social número 3 de Guelatao, planteó a Andrés Manuel López Obrador las carencias presupuestales que enfrenta para la alimentación de los alumnos Foto: Octavio Velez
San Pablo Guelatao, Oax., 15 de marzo. La reforma integral migratoria ofrecida por el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, que Felipe Calderón Hinojosa celebró como un logro de México, es "pura faramalla", porque no resuelve de fondo el problema, afirmó Andrés Manuel López Obrador al iniciar una gira de tres días por el estado de Oaxaca.
El "presidente legítimo" sostuvo que Calderón Hinojosa debería centrarse en atacar el origen del fenómeno migratorio en vez de esperar el cumplimiento del ofrecimiento de Bush, porque "el fondo del problema es la falta de trabajo".
Lo que se debería hacer, anotó, "es atender las causas de la pobreza y la marginación que existen en México para evitar que sigan saliendo miles y miles de mexicanos de su tierra". Pero como Calderón "es un pelele" no lo hará; "no lo dejan quienes lo impusieron, porque su prioridad es el gran capital. El cínico de Calderón no trata ese tema (pues) está para servir a los de arriba, a quienes lo pusieron" (en el cargo), remarcó.
El tabasqueño expuso que el panista se ha convertido en "rehén de las minorías y de la mafia de cuello blanco", porque no va a cambiar la política económica antipopular y entreguista, "se la va a pasar pagando facturas".
"A ver, por qué no hubo una protesta enérgica del gobierno ahora que están construyendo el muro (en la frontera de México y Estados Unidos) y ahora que (la policía estadunidense) tomó el control en Mérida" durante la visita de George W. Bush, cuestionó.
El ex candidato presidencial de la coalición Por el Bien de Todos afirmó que la solución a la crisis en Oaxaca "sigue pasando necesariamente por la renuncia" de Ulises Ruiz Ortiz a la gubernatura. Lamentó que el pueblo haya tenido que pagar las consecuencias de un acuerdo entre el PRI y el PAN para mantener
al mandatario en el poder y legitimar al "pelele".
Asimismo, exigió que el informe especial de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos sobre las agresiones a los simpatizantes de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca sean atendidas y se castigue a los autores.
A su llegada a este municipio, López Obrador montó una guardia de honor en el monumento a Benito Juárez, acompañado por autoridades municipales y agrarias, así como por senadores y diputados federales y locales del Frente Amplio Progresista, integrado por PRD, PT y Convergencia.
Posteriormente, durante un mitin en la Plaza Cívica, dijo, entre aplausos y vítores de sus seguidores, que los mexicanos tenemos un profundo respeto a don Benito Juárez, "pues todavía gobierna con su ejemplo. Es uno de los mejores políticos del mundo y, desde luego, el mejor presidente que ha habido en nuestro país".
En el palacio municipal firmó el libro de visitantes distinguidos, donde escribió: "De nuevo en Guelatao, en la tierra, en el pueblo del mejor presidente de México, Benito Juárez García. En estos tiempos tan difíciles para Oaxaca y para México nos inspira su ejemplo y de manera particular su fe en el triunfo de las causas justas. Con gran afecto, para el mejor ejemplo de lealtad a México".
Antes, cuando llegó al aeropuerto de Oaxaca, López Obrador cuestionó a los medios de comunicación que alaban o promocionan la figura de Calderón, porque así no se puede sostener a un presidente.