Asegura que le ha devuelto a México "el liderazgo en el plano internacional"
Pese a errores y malos augurios, "llevo la rienda firme" del país, afirma Calderón
Ampliar la imagen Durante su visita a Chiapas, el presidente Felipe Calderón puso en marcha las obras de la carretera Tapachula-Talismán Foto: Notimex
Tuxtla Chico, Chis., 10 de marzo. Al festejar su primeros 100 días de gobierno, en un acto masivo, el presidente Felipe Calderón aseguró que lleva la "rienda firme" del país a pesar de aciertos y errores, de adversidades, de mezquindades y malos augurios.
Frente a indígenas y campesinos de la región del Soconusco hizo un primer balance sobre el cumplimiento de sus 100 compromisos. Aseguró que en todos ha avanzado, aunque en algunos "con más profundidad que otros". Fue insistente en señalar que México tiene "rumbo claro" y "hemos puesto lo mejor de nosotros mismos".
El mandatario hizo este acto simbólico precisamente en la entidad donde se asienta el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), y el gobernador, su "amigo" el ex priísta Juan Sabines, ganó con las siglas del PRD aunque fue de los primeros en deslindarse del ex candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador.
Desde la llegada del Presidente a Chiapas, Sabines agradeció el hecho de que festejara ahí los "fructíferos 100 días de su gobierno". Y para demostrarlo, en el trayecto del aeropuerto de Tapachula a Tuxtla Chico mandó colocar al menos seis mantas de unos 10 metros de alto en las que se muestra al gobernador saludando a Calderón, y con la frase "La unidad siempre da buenos resultados".
Este hecho fue reconocido por el jefe del Ejecutivo federal en su discurso: "Qué razón tiene el gobernador en ese mensaje", y prometió que por eso Chiapas tendrá todo su apoyo.
Sabines se esmeró en hacerle el día alegre al michoacano.
A diferencia de otras sencillas ceremonias de inicio de construcción de carreteras, en la de Tapachula-Talismán se encontró con unas 3 mil personas que provenían de diversos municipios, como Comitán, San Cristóbal, Teopisca, Oazamán, Pijijiapan y Cacahoatán.
A las diez de la mañana, el lugar estaba lleno de camiones de volteo y autobuses que transportaron a la gente desde sus lugares de origen. Aquello parecía un mitin de campaña o los tradicionales actos de presidentes priístas.
"¡Calderón, hermano, Tapachula te da la mano", "Calderón, Calderón", gritaban grupos de mujeres que tras las vallas se mostraban desesperadas por acercarse a Sabines y al Presidente.
A diferencia de su primer acto masivo en el estado panista de San Luis Potosí, éste fue más efusivo. A su paso por la larga valla metálica repartió besos y abrazos, recibió un collar de flores y obsequios de los indígenas. "Estamos con usted, señor Presidente", gritaba una mujer.
"El Presidente hizo favor de corregirme"
Ya en el templete, Calderón se mostraba gustoso, incluso se olvidó por un rato de la rigidez acostumbrada y bromeó a costa de Luis Téllez, titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT).
Cuando Téllez dijo dos veces "Chapas" en vez de Chiapas, el mandatario movió la cabeza en señal desaprobatoria, escribió un mensaje y lo entregó a su jefe de ayudantes, Mario Castro.
El titular de la SCT lo leyó y no tuvo más remedio que referirse al tema: "aquí el señor Presidente hizo el favor de corregirme, diría Chiapas, con Felipe", y luego cuantas veces pudo incluyó en su discurso el nombre del estado, lo que hacía sonreír al michoacano y a los pobladores, que se dieron cuenta de la amonestación.
Después Sabines salpicó su mensaje de elogios para Calderón, a quien llamó Presidente de todos los mexicanos. "En 100 días le ha dado rumbo y certeza a México, y como usted lo ha dicho, gobierna para todos con espíritu conciliador, de combate sin fin a la delincuencia, solidario con las mujeres y los mayores, un gobierno con decisión para lograr los acuerdos y las reformas que México demanda", afirmó el ex priísta.
Como Calderón llegó a sus primeros 100 días de gobierno con cerca de 17 compromisos sin cumplir de los 100 que se propuso alcanzar, todavía hizo un esfuerzo por restar algunos, pero finalmente reconoció que "algunos los hemos podido completar plenamente, otros por su propia naturaleza siguen en proceso".
Fue cuando afirmó que con aciertos y errores ha cumplido con su deber. "Llevamos la rienda firme, tenemos rumbo claro y un proyecto bien definido para alcanzar nuestras metas siguiendo el plan trazado en los cinco ejes estratégicos a los cuales me comprometí".
Y enunció un largo listado de "compromisos cumplidos", entre los que mencionó las acciones de combate al crimen organizado, la creación de 116 mil empleos formales en febrero, la apertura de 500 estancias infantiles, la ampliación del Procampo, así como la creación del Seguro Médico Universal para niños nacidos durante su administración.
En este primer balance -presentará otro en los próximos días- se defendió de las críticas que suscitó el incremento al precio de la tortilla y argumentó que, "dentro de las circunstancias", no permitió "dejar a la suerte del mercado la salud y nutrición de los mexicanos.
Como uno de sus principales pendientes se encuentra en el capítulo de democracia efectiva, se dedicó a argumentar que ha impulsado el diálogo y el entendimiento con los poderes, y que además ha sido respetuoso del Congreso publicando las leyes que ha decidido.
También se enorgulleció de que le ha devuelto al país el liderazgo en el plano internacional, y sin mencionar su pleito con el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, señaló que México ha brindado una "mano extendida" a América Latina, yendo al encuentro de sus hermanos de Centroamérica y hablando "claro y fuerte en el mundo" de lo que el país es y debe ser en un futuro.
Al final afirmó que ha puesto el corazón por su tierra. "Las demandas de cada mexicano y de cada mexicana nos estimulan a seguir adelante hasta que cumplamos el último día de nuestro mandato".