Está en el lugar 21; la primera jornada, suspendida por lluvia
Inicio incierto de Ochoa en Bosque Real
Lorena Ochoa volvió a marcar un arranque mesurado en el torneo Honoring Alejo Peralta, parte del Tour de la Asociación de Golf Femenil Profesional (LPGA, por sus siglas en inglés), en el que de nuevo se enfrenta con Annika Sorenstam, aunque a diferencia de la sueca, que busca la victoria número 70 de su carrera, la mexicana persigue su décimo triunfo.
En la primera jornada, que fue suspendida por lluvia cuando se disputaba el segundo bloque, Ochoa alcanzó a terminar su ronda con una tarjeta de 71 golpes, uno bajo par, para ubicarse momentáneamente en el puesto 21, que resulta muy incierto, pues aún falta la mitad de las jugadoras, casi 70.
Al margen de la rivalidad que gira en torno a la indiscutible multicampeona Sorenstam, y Ochoa, mejor jugadora en 2006, destaca el alto nivel de varias golfistas, como demostró la estadunidense Stacy Prammanasudh, quien se ubicó al frente de la tabla con la menor suma de 67 impactos.
A pesar del nerviosismo, sobre todo entre unas 200 personas en la galería que acompañaban cada golpe de Ochoa, la golfista mantuvo el control.
Aunque admitió que se sentía algo presionada por estar en casa, trató de ser objetiva. "La verdad es que fue un día difícil desde la mañana, sobre todo el arranque. Cometí un par de errores; creo que estuve fallando los tiros del lado derecho", indicó la jalisciense, quien compartió el field con Prammanasudh, y la también estadunidense Natalie Gulbis.
Ochoa señaló que después de haber salvado un birdie en el quinto hoyo, se sintió más cómoda para continuar en la lucha, lo que logró, pese a los tiros de gran alcance con los que se distinguió Prammanasudh en la mayoría de sus salidas, y con los que mantuvo a sus dos rivales siempre en bajo perfil.
Terminar bajo par es positivo
"Por el tipo de ronda que hice, creo que fue positivo haber terminado bajo par. Es importante es estar en números rojos y no tan lejos del primer lugar, así que debo ser positiva y estar contenta de haber terminado debajo de par", insistió.
Ochoa, que tras haber impuesto su ley en la campaña anterior, en la que también fue la líder de ganancias, este año aún no ha despegado, con actuaciones muy por debajo de las punteras en los dos torneos que lleva en el Tour 2007.
De cara a la segunda ronda, que ya establece cortes, la mexicana espera "tener mejor inicio. Va a ser muy importante hacer los cinco o seis primeros debajo de par, para lograr un buen ritmo y hacer una ronda baja, de muchos birdies".
Por otro lado, Ochoa hizo la observación acerca de los carritos que se utilizan en esta competencia, de acuerdo con la decisión de las autoridades de la LPGA, para darle mayor dinámica.
No obstante, la mexicana consideró que no caminar el campo (de 6 mil 876 yardas) supone igualdad de circunstancias para todas las jugadoras, pero resta ventaja que "tendríamos las que mantenemos buena condición física".
Aunque Sorenstam está en busca de su tercera victoria al hilo en Bosque Real -ubicado en Huixquilucan, estado de México-, la sueca expresó su mayor respeto hacia las contrincantes y hacia el mismo campo, que "es bastante difícil". Acerca de su percepción en relación con su primera visita a México, expresó: "Noto más público, mucho más atento, más educado y apoya más".
La lluvia, que obligó a la suspensión desde las 15:08 horas, dejó pendiente gran parte de la primera jornada, en la que las demás mexicanas participantes se ubicaron de la siguiente manera: en el 36, Tanya Dergal, colocada en el par en el hoyo siete; en el 55, Alejandra Martín y Liliana Alvarez, más uno en el quinto y sexto; en el puesto 92, Violeta Retamoza, más tres el octavo; Sofía Sheridan y Alejandra Llaneza, ambas más tres en el séptimo; también, empatadas, en el 112, Ana Alicia Malagón y Ana Luisa Bada. Más cuatro en el quinto y séptimo lugares.
Además de completarse la primera jornada, este sábado deberá jugarse toda la segunda ronda, que reportará un corte para extraer a las 60 mejores.