A 100 días del sexenio, aún no se concretan estrategias del Presidente contra el crimen
Van 291 ejecutados pese a las acciones antinarco
A pesar de la puesta en marcha de operativos policiaco-militares contra la delincuencia organizada en nueve estados de la República, el despliegue de más de 23 mil hombres y el compromiso oficial de que se utilizaría "toda la fuerza para resolver los problemas de intranquilidad y devolver la paz a la sociedad", a 100 días del gobierno de Felipe Calderón, instancias gubernamentales reconocen que han sido ejecutadas 291 personas, la mayoría en Guerrero, Sinaloa, Baja California y Michoacán.
En ese contexto, las estrategias contra el crimen organizado no han sido terminadas, las propuestas de reforma legislativa siguen en integración y se presentarán en varias etapas al Congreso.
Por ello, la formación del cuerpo nacional de policía no se ha concretado, a pesar de que la Policía Federal Preventiva (PFP) y la Agencia Federal de Investigación (AFI) dependen de un solo mando.
Asimismo, el proyecto de instalar 500 estaciones de policía en el país no ha sido puesto en marcha, ya que no se cuenta con elementos suficientes.
Uno de los grandes problemas en ese sentido es que a pesar del anuncio presidencial de que se transferirían 10 mil efectivos de las secretarías de la Defensa Nacional y Marina a la policía federal, no se ha concretado, debido a que los mandos castrenses dejaron en libertad a sus elementos para que quien lo desee se sume de manera voluntaria a la nueva corporación, perdiendo sus derechos militares.
Respecto a los operativos que se realizan en Sinaloa, Guerrero, Michoacán, Baja California, Nuevo León, Sinaloa, Durango y Chihuahua, el último reporte gubernamental -del pasado 17 de febrero- señala que a pesar del gran despliegue policiaco y militar, sólo han sido presentadas 360 personas ante el Ministerio Público Federal, de las cuales, menos de 50 por ciento (142) fueron puestas a disposición de un juez, y apenas a 94 se les dictó auto de formal prisión.
La Secretaría de Seguridad Pública (SSP) federal reportó que hasta febrero había detenido a 900 delincuentes, pero la mayoría fueron entregados a autoridades locales por la comisión de delitos del fuero común.
A pesar de que desde el 8 de diciembre de 2006 se pusieron en marcha los operativos contra la delincuencia organizada, las ejecuciones continúan, ya no sólo en las nueve entidades donde se han desplegado las fuerzas militar y policial, sino que la situación se ha extendido a estados donde hasta hace unos meses no ocurrían esos hechos, como Aguascalientes, Campeche y Tabasco.
De acuerdo con reportes oficiales, hasta el pasado 5 de marzo la cifra de ejecuciones en el país ascendía a 291 casos, sin embargo, los registros de las autoridades estatales difieren de los datos federales.
Según información obtenida en las procuradurías locales, en estos 100 días del calderonismo, en Sinaloa se han cometido 65 homicidios vinculados con el crimen organizado; Guerrero, 90; Michoacán, 40; Tabasco, uno; Nuevo León, 18 (la mitad eran policías); Veracruz, 7; Baja California, 84; Durango, 28; Campeche, 9; Tamaulipas, 20, y 23 en Chihuahua, lo que arroja una cifra de 385 crímenes.
Según las autoridades federales, el incremento de la violencia y su repercusión en entidades que antes se consideraban de baja incidencia delictiva supuestamente se debe al reacomodo en los liderazgos de los cárteles, en parte, motivado por la extradición de capos de la droga a Estados Unidos en enero pasado.
Respecto a las actividades de combate al narcotráfico, las labores de erradicación de cultivos ilícitos han sido desarrolladas esencialmente por el Ejército de manera manual, ya que desde el 28 de noviembre de 2006 cesaron las actividades de intercepción y erradicación por fumigación aérea por parte de la PGR.