Por momentos, los pupilos de José Luis Trejo mostraron poca actitud
Efectivo, ayer el Atlante cobró factura por cansancio al Necaxa
El Hobbit Bermúdez anotó y tuvo destacada actuación
Potros corrigió accionar defensivo
Ante escasa pero emocionada afición, Atlante y Necaxa revivieron en el estadio Azteca uno los clásicos más antiguos del futbol mexicano, que esta vez culminó con una cómoda victoria de 3-0 en favor de los azulgrana, quienes renovaron así la esperanza de mejorar su desempeño en lo que resta del Clausura 2007.
Apenas iniciado el encuentro, al minuto seis, Christian Hobbit Bermúdez, integrante de la selección Sub-20, consiguió desmarcarse con velocidad y sorprendió al portero Alexandro Alvarez con un tiro por encima que se clavó en el ángulo superior izquierdo y abrió el marcador.
Siguieron minutos de buen juego para ambos bandos, con orden y llegadas claras en la ofensiva, pero en poco tiempo se hicieron visibles los puntos débiles de locales y visitantes.
Los Potros evidenciaron fallas defensivas recurrentes, que pusieron en peligro la ventaja mínima, pero la presencia segura e inspirada de su portero, el argentino Federico Vilar, salvó siempre el resultado.
También el desempeño de algunos jugadores, como el Hobbit, oriundo de Ciudad Nezahualcóyotl y formado en la cantera del Atlante, quien derrochó esfuerzo, buenos pases y asistencia en el mediocampo.
Por su parte, los Hidrorrayos, acusaron recibo del desgaste físico por los tres partidos jugados en una semana, pero también mostraron poca garra, actitud que molestó a su porra e hizo que por momentos alentara al equipo contrario.
Al minuto 30, cuando el Necaxa jugaba con calidad mas poca energía y el Atlante insistía con disparos al arco, el uruguayo Gustavo Biscayzacú marcó el segundo gol luego de un sombrerito que superó nuevamente al portero Alvarez.
Así, bajo un apretado dominio de los locales, culminó el primer tiempo. Al iniciar el segundo, el director técnico de los Hidrorrayos, José Luis Trejo, reforzó su delantera con el ingreso de los brasileños Everaldo Barbosa y Kléber Boas, vitoreados por su afición.
De poco sirvió la estrategia, porque la supremacía atlantista se reafirmó tras corregir imprecisiones defensivas con despejes y tiros por banda. El Necaxa, en cambio, parecía no despertar y comenzó a desesperarse.
Fue así que al 78 Horacio Cervantes, ex jugador de los Potros que tuvo un mal partido, cometió un error que culminó en penal a favor de los locales. Disparó el argentino Javier Muñoz Mustafá y, aunque el balón fue a manos del portero, aprovechó el rebote y convirtió el tercer gol que selló el dominio del Atlante.
Los restantes minutos se fueron en más intentos de los azulgrana y unas pocas llegadas de los visitantes. Sonó el silbatazo final y, con tres puntos en la bolsa y renovadas esperanzas de remontar en las restantes nueve fechas del torneo, los Potros levantaron los brazos y saludaron a su fiel afición, que los alentó los 90 minutos sin parar.