En cualquier estrato social hay violencia de género
En México, el porcentaje de mujeres que sufren violencia, según condición y actividad, presenta sólo ligeras variaciones: 49.60 por ciento de las que son económicamente activas, 45.20 por ciento de las que se ocupan de los quehaceres domésticos, y 39.70 por ciento que realizan otras tareas. Así, la violencia de género se presenta en todos los estratos socioeconómicos.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEI), derivados de la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (Endireh) 2003, en colaboración con el Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM, 46.6 por ciento de mujeres de 15 años y más con pareja residente en el hogar, dijo haber sufrido algún tipo de maltrato.
En gran parte de los hogares mexicanos es insuficiente la expresión de afecto, ya que es mínimo o nulo el cariño que se dan entre sí los miembros de una familia, revela la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Familias (Endifam), levantada por el Instituto de Investigaciones Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México (IIS-UNAM), a solicitud del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia.
Las mujeres pueden agredir y ser violentas, pero la mayor parte de la violencia sexual, física y emocional es cometida por el hombre. Así, se concluye que este fenómeno es en gran medida una conducta o comportamiento aprendido.
Cambios en la estructura familiar
Al respecto, Ismael Torres Gómez, profesor de la Escuela Nacional de Trabajo Social, consideró que la familia tradicional mexicana está en constante cambio, pero el riesgo es que en el contexto de la globalización se han olvidado las tradiciones y costumbres. Frente a ello, pidió estar alertas porque desde el exterior llegan influencias ajenas, que provocan confusión, mientras existe improvisación y abandono de la cultura jurídica.
"No se ha estructurado la familia moderna. Se ha parchado. Por ejemplo, para algunos expertos, el matrimonio es una institución, mientras la sociedad lo está tomando como un contrato", concluyó.
De acuerdo con los datos de la muestra, aplicada a 24 mil familias en toda la República Mexicana y representativo a escala nacional, siete son los motivos que constituyen la primera causa de conflicto en ese núcleo social: asuntos económicos; problemas relacionados con la concesión de permisos y la autoridad; así como dificultades de convivencia o comunicación.
También, cuestiones relativas a la conducta o con la educación de los hijos, con la misma importancia que los atribuidos a las diferencias de carácter o de opinión; el cuidado y orden del hogar; adicciones, celos, infidelidad, así como violencia.
Dicha encuesta -cuya coordinadora académica es la investigadora del IIS Cecilia Rabell- tiene como objetivos centrales conocer las características más importantes de la dinámica de las familias mexicanas e identificar los cambios que han tenido lugar a partir de la segunda mitad del siglo XX.