Seguridad, inversión y empleos, temas prioritarios: Espinosa
La política exterior ya no es asunto de izquierda o derecha
Presenta Sarukhán sus cartas credenciales a George W. Bush
Washington, 27 de febrero. La canciller Patricia Espinosa ofreció hoy su visión de la política exterior mexicana, al reiterar que ésta ya no es asunto de ''izquierda o derecha, sino entre el pasado y el futuro'', y con ello reafirmó la línea planteada por gobiernos mexicanos aquí durante casi 20 años: promover la inversión extranjera, el comercio, generar empleo en México y disminuir así la pobreza y el flujo migratorio.
Ante un foro coauspiciado por el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales, el Woodrow Wilson Center y Diálogo Interamericano, la funcionaria presentó las líneas generales de la política exterior del presidente Felipe Calderón, subrayando que la política externa y la interna comparten tres prioridades: recuperación de la seguridad para la población, para los inversionistas y para los turistas, así como combate a la pobreza y generación de empleos.
Repitió la frase que ha elaborado el gobierno mexicano para caracterizar el vínculo entre política exterior y política interna: ''Queremos más mundo en México y más México en el mundo''.
Ante especialistas, académicos y funcionarios aseguró que ''la democracia en México ha sido fortalecida después de un proceso electoral cerrado y un proceso poselectoral complicado'', y dijo que las instituciones democráticas de México salieron más fuertes, con el pueblo, ''optando por la democracia y el imperio de la ley''.
En torno a la relación con Estados Unidos, Espinosa Cantellano recalcó que es amplia y compleja, con ''oportunidades y desafíos'', y dijo que hay una creciente conciencia en México en favor de ''una relación más cercana y constructiva'' con Washington. Definió la relación bilateral como una entre ''buenos vecinos'', ''socios estratégicos'' y con "un nivel sin precedente de cooperación''. A la vez, subrayó que la ''corresponsabilidad'' tiene que ser eje de la relación en los rubros de inmigración, combate al crimen organizado y seguridad fronteriza, entre otros.
Sobre migración, la canciller repitió que aunque no puede ser el único tema central de la política bilateral, continúa como prioridad. Calderón, informó, ha declarado que ''estamos muy conscientes de que la solución a largo plazo es crear más empleos bien remunerados para los mexicanos en México'', y que eso es la base para la discusión bilateral con Estados Unidos. El gobierno mexicano, indicó, continuará defendiendo los derechos fundamentales de los migrantes, y recordó que ambos países se benefician de la migración.
Al mismo tiempo, la funcionaria destacó que ''México nunca aprobará la construcción de bardas y barreras'' en la frontera, y que propone una ''visión más cooperativa''. Interrogada sobre cómo actuará el país en el debate hemisférico entre posiciones de gobiernos de izquierda y de derecha, Espinosa dijo: ''Creemos que el debate no es uno entre la derecha y la izquierda, sino entre el pasado y el futuro'' y, por lo tanto, la política nacional es ''orientada hacia el futuro''.
Aunque el país es parte de América del Norte, agregó, y goza de profundas relaciones con Estados Unidos y Canadá, ''México también es latinoamericano'' y no hay contradicción entre ambos. Por eso, añadió, América Latina es una prioridad de la política exterior de Felipe Calderón, y señaló que después de la visita de George W. Bush, en marzo, el presidente mexicano también será anfitrión de visitas de Luiz Inacio Lula da Silva, de Brasil, y de Michelle Bachelet, de Chile.
Interrogada por La Jornada sobre qué había de nuevo en el planteamiento general del gobierno de Calderón para la política con Estados Unidos, ya que desde hace casi 20 años los presidentes mexicanos han insistido en sus visitas a Washington en que el comercio y la integración económica son el camino para el desarrollo y con ello la solución a la migración, y que los resultados no han sido los prometidos, Espinosa Cantellano sólo repitió: ''En lugar de tener a gente cruzando la frontera, deberíamos tener inversión cruzándola para crear empleos en México''. En su planteamiento no identificó algo nuevo en la propuesta del gobierno ''orientado hacia el futuro''.
Por otra parte, Arturo Sarukhán presentó este martes sus cartas credenciales ante el presidente George W. Bush, en la Casa Blanca, y a partir de ahora oficialmente ejerce como embajador de México en Estados Unidos.
Sarukhán Casamitjana ofreció saludos calurosos a Bush, por parte de Calderón, y subrayó que la visita del presidente estadunidense a México, en marzo, ''fortalecerá las bases ya sólidas sobre las que descansa nuestra relación bilateral''. Afirmó que las dimensiones, complejidad y vitalidad de la relación entre ambas naciones ''no tiene paralelo en el mundo'', y que la corresponsabilidad y la confianza mutua son los pilares para el manejo de la agenda común, informó la embajada.
La canciller Espinosa continuó hoy su visita de trabajo al realizar varias reuniones con legisladores, expertos y especialistas en relaciones interamericanas. Es acompañada por el subsecretario de Relaciones Exteriores para América del Norte, Carlos Rico, y el embajador Sarukhán.