Niegan procesados haber participado en ataques del 11-M
Madrid, 26 de febrero. Rabei Osman Sayed Ahmed, conocido como Mohamed El Egipcio, presunto cerebro de los atentados del 11 de marzo de 2004 en Madrid, rechazó hoy haber instigado los ataques y negó que sea su voz la que se escucha en las grabaciones policiales, al reanudarse en Madrid los juicios sobre el caso.
En las grabaciones, el acusado, para quien la fiscalía pide 38 mil 656 años de cárcel, habría afirmado que los atentados fueron idea suya. "Me costó mucha paciencia y mucho estudio", se escucha, y añade la grabación que fue un proyecto de dos años y medio.
El Egipcio aseguró que no es su voz la que se escucha en las conversaciones que la policía italiana grabó en su apartamento de Milán y que además la traducción es defectuosa en 80 por ciento. Tras rechazar que haya sido el sido el autor intelectual de los ataques, admitió haber comentado con un amigo el atentado al ver la noticia en la televisión.
Asimismo, reconoció una conversación telefónica con Mourad Chabarou, detenido en Bélgica bajo acusaciones de terrorismo, y en la que usó expresiones como "amigos de Madrid" y "hermanos", una palabra que, dijo, es muy extendida en el mundo islámico.
También admitió que conoció a Serhane Ben Abdelmajid, alias El Tunecino, quien se suicidó en un departamento de Leganés durante un operativo policial semanas después de los atentados, y a Fouad El Morabit Amghar, otro procesado.
Otro interrogado hoy, el marroquí Mohamed Moussaten, sobrino de Youssef Belhadj, uno de los supuestos cerebros de los atentados, negó el contenido de su declaración sumarial que involucró a su tío en el 11-M, y afirmó que lo dijo por coacción policial.
Un procesado más, el marroquí Mohamed Bouharrat dijo que aparecieron fotografías suyas en los escombros de Leganés porque las olvidó en el coche de Jamal Ahmidan, El chino, supuesto jefe operativo de los ataques y que también se quitó la vida en Leganés.