Sólo 20% de la población mundial concentra 80% de la disponibilidad del líquido
Por problemas de agua mueren cada año 35 millones de personas
Urge crear conciencia para proteger este recurso natural finito, destacan ecologistas
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Una mujer lava ropa en la presa Valle de Bravo, la más grande del Sistema Cutzamala en el estado de México, que surte de agua a la capital del país. Imagen de archivo
Foto: José Carlo Gonález
El derecho humano al agua no se ha garantizado, y este elemento podría ser considerado como el "oro líquido", pues al igual que con el metal amarillo, una pequeña parte de la población concentra la mayor cantidad de la riqueza, mientras que los más humildes carecen de ella, afirmó Fernando García, de la fundación Fraternidad amigos del agua y la vida.
El activista refirió que alrededor de 20 por ciento de la población mundial concentra 80 por ciento de la disponibilidad de agua total del planeta, "cosa similar a lo que sucede con la riqueza económica"; por ello, adujo, es necesario crear conciencia para la protección de ese recurso natural "finito".
En ese sentido, informó que la próxima semana se desarrollará el primer Encuentro internacional sobre la naturaleza del agua, el espíritu y la vida, en el que se "promoverá el compromiso y la reflexión con el agua y la naturaleza; porque cada vez es más evidente la descomposición ambiental". En la reunión participarán conferencistas internacionales como el japonés Masaru Emoto, quien ha hecho investigación en el tema del cuidado del agua.
Alertó que la problemática por el líquido es tan grave que cada año mueren en el mundo 35 millones de personas por problemas hídricos; "el agua potable se está agotando y no queremos darnos cuenta de ello", manifestó.
García subrayó que uno de los países que más dañan el medio ambiente y depredan los recursos naturales es Estados Unidos, que junto con Australia se niega a firmar el Protocolo de Kyoto, pues dichas naciones, señaló, "anteponen el progreso a la sobrevivencia humana".
Por ejemplo, alertó que cada año se pierden 16 millones de hectáreas de bosques en el mundo debido a la tala indiscriminada, y al destruir los árboles -los principales contenedores de líquido y oxígeno- se crea un descontrol ambiental que ya está perjudicando la vida en el mundo.
Por ello, consideró necesario crear espacios para las movilizaciones ciudadanas, que además del activismo ante quienes se niegan a favorecer el medio ambiente, generen conciencia en la población, sobre todo en las nuevas generaciones, "para cambiar sus hábitos".
Asimismo, dijo que es "urgente" que los líderes de cada país, en especial el nuestro, comiencen a generar políticas públicas para el uso de energías alternativas que favorezcan al medio ambiente, pues las generadas mediante petróleo o carbón son las que más contaminación generan.