Los tres partidos descartaron dar marcha atrás en la legislación

Arremeten PAN, PRI y PRD contra la CEM por criticar ley contra pederastas

Los políticos no se deben entrometer en la vida interna de la Iglesia: Héctor González

VICTOR BALLINAS, ANDREA BECERRIL

El presidente del Senado, el priísta Manlio Fabio Beltrones, advirtió que la Iglesia católica "debería estar más preocupada por los intereses de la sociedad en su conjunto, que es la decisión de atacar a fondo un delito como es la pederastia, y no en defender sus intereses particulares".

Al responder las críticas que la víspera formuló la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) a las reformas legales en materia de explotación sexual infantil, Beltrones señaló que la jerarquía religiosa debería "congratularse" por las sanciones que se impondrán a sacerdotes, maestros y todos quienes abusen de menores.

Por su parte, el coordinador de los senadores del Partido Acción Nacional (PAN), Santiago Creel, sostuvo que no se dará marcha atrás en las reformas recién aprobadas para endurecer las sanciones contra la explotación sexual y trata de niños, "porque lo hicimos con la convicción de que debe castigarse a todo aquel que atente contra la dignidad de los menores del país".

Sin embargo, dijo que se analizará la posición de la CEM. "Queremos escuchar de viva voz los planteamientos que hagan los distintos jerarcas de la Iglesia, analizarlos y, si es el caso, mejorar la legislación". Pero, advirtió: "que no haya confusión, la ley va, las penas las avalamos tal como fueron promulgadas y debe haber cárcel y penas severísimas para todos aquellos que atenten contra la dignidad de los menores".

Creel abundó: "lo que arguye la CEM va en el sentido de decir que están totalmente de acuerdo con las leyes del Estado, pero que el Estado no intervenga en las decisiones propias de las asociaciones religiosas, como es el caso de pedir que se le retire el ministerio a quienes incumplan esta ley en contra de menores, y esto es algo que vamos a revisar, para ver que la separación Estado-Iglesia sea tal como la dictó desde su época Benito Juárez".

Se pretende que "efectivamente sea una separación del Estado, la parte que corresponde al castigo quede muy firme y la parte correspondiente a las autoridades eclesiales o a las autoridades de asociaciones religiosas también se respete su autonomía".

Trascendió en el Senado que la molestia de la CEM no sólo se debe al punto de la inhabilitación de los sacerdotes pederastas, sino que las penas se les hayan duplicado de 15 a 30 años de cárcel, y de 2 mil 500 días de salario mínimo de multa, a 5 mil días.

Mientras, el coordinador de los senadores del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Carlos Navarrete, aseveró que el Senado está dispuesto a escuchar todas las opiniones respecto a las leyes que debate y aprueba, pero, subrayó, con el debido respeto a la jerarquía eclesiástica, "hay un reclamo generalizado en el país porque en el Congreso de la Unión tomemos medidas para castigar de manera enérgica, y darle elementos a la justicia mexicana, para enfrentar el grave problema de personajes con autoridad sobre menores de edad, que abusando de su posición de jerarquía o autoridad moral han denigrado la profesión o la actividad que realizan".

Cuestionado respecto a la posición de la CEM, que no acepta que sea la autoridad judicial la que inhabilite a los sacerdotes pederastas, el perredista subrayó: "desde luego que no daremos marcha atrás. No, porque si la Iglesia hubiera dado muestras de ser sensible a este tema ya tuviéramos un conjunto de sacerdotes inhabilitados, y no habría necesidad de que los citaran en Estados Unidos para fincarles responsabilidades a sacerdotes que están cometiendo estos graves delitos en el país".

El clero responde

La respuesta del clero a la iniciativa del Senado contra la pederastia fue un llamado a la clase política para que "no se entrometa en la vida interna de la Iglesia" y a recomendar que se pongan a legislar en asuntos civiles, ya que sólo han hecho "leyes absurdas". Esto lo señaló ayer el arzobispo de Durango, Héctor González Martínez, quien pidió a los políticos que dejen a la Iglesia resolver sus problemas.

Sostuvo que la Iglesia está de acuerdo en que se castigue a los pederastas, pero no por medio de acciones que promuevan los políticos, sino que se apliquen sanciones a través de las leyes que rigen a la Iglesia católica.

Por su parte, el gobernador del estado de México, Enrique Peña Nieto, dijo que "no hay sector que tenga fuero en el país" y que las leyes son de carácter general, obligatorias y no hacen "excepciones para nadie", incluida la Iglesia. Aseveró que "tenemos que estar en el ánimo de penalizar y castigar prácticas nocivas para la sociedad misma, donde no cabe que haya grupos de privilegio ni de exclusión".

Con información de Saúl Maldonado y Silvia Chávez, corresponsales