Pasta de Conchos, una lección para pevenir tragedias
Alan McMillan, presidente del National Safety Council (NSC), organización internacional líder en seguridad y salud ocupacional, consideró muy oportuno que el gobierno federal haya iniciado el análisis sobre las causas que ocasionaron la tragedia de hace un año en la mina Pasta de Conchos, en Coahuila, y puedan aprender de este incidente para prevenir otros.
Indicó que algunas ocupaciones, por su naturaleza, son bastante peligrosas, como es el caso de la minería, petroquímica, construcción y electricidad, y aunque las soluciones para este tipo de tragedias parecen sencillas, no lo son. Sin embargo, la buena noticia es que los riesgos se pueden controlar.
México, dijo, es una de las naciones que viven un desarrollo económico e industrial acelerado y, por ello, con demasiada frecuencia, el crecimiento aumenta el número de lesiones incidentales y muertes.
Solamente en México ocurre un promedio de 809 accidentes de trabajo al día, según los registros del Instituto Mexicano del Seguro Social. Sin embargo, cuando se analizan las circunstancias de cada uno de éstos, se ve claramente que pudieron prevenirse.
La Organización Internacional del Trabajo estima 5 millones de incidentes ocupacionales y 90 mil muertes relacionadas con el trabajo anualmente en Latinoamérica y el Caribe. Esto significa un promedio de 36 lesiones ocupacionales cada minuto, y más de 250 decesos cada día.
Largo historial
El NSC es una organización fundada hace casi 100 años, que tiene un largo historial conectando empresas, gobiernos, organizaciones no gubernamentales y profesionales en la materia, con la intención de poner en la agenda los asuntos primordiales de la seguridad y la salud.
Al participar en el Congreso sobre Seguridad 2007, con la ponencia Responsabilidad social corporativa, Alan McMillan recordó que en el siglo XX, a medida que los problemas de seguridad y salud en el trabajo fueron cambiando, también evolucionaron las prioridades e iniciativas del NSC para combatirlos. Las muertes relacionadas con el trabajo en Estados Unidos decrecieron 93 por ciento desde que se fundó la organización.
No obstante, las lesiones no intencionales siguen siendo la primera causa de muerte para el grupo de hasta 40 años de edad, y la quinta causa para todas las edades, siguiendo de cerca las enfermedades cardiacas, cáncer y afecciones respiratorias.
Manifestó que cada vez es más evidente que la inversión en seguridad y salud sí es parte del negocio, porque reditúa. Un estudio reciente sobre empresas estadunidense encontró que por cada dólar invertido en seguridad y salud, las compañías aseguran un retorno de tres dólares.
De acuerdo con la Organización Panamericana de la Salud, los estudios de costo-beneficio en América Central han demostrado que cuando las compañías invierten en programas de seguridad y salud para sus empleados, disminuye considerablemente la extensión de las jornadas de trabajo, en algunos casos de 45 por ciento a 12 por ciento anual.