Conmemoran el 40 aniversario de la apertura y firma del Tratado de Tlatelolco

Convoca la SRE a establecer nuevas áreas desnuclearizadas

Plantea evitar el armamentismo en zonas como Medio Oriente, Corea y el sur de Asia

JOSE ANTONIO ROMAN

La nuevas amenazas a la paz y a la seguridad internacionales obligan al conjunto de las naciones a renovar sus esfuerzos para establecer otras áreas desnuclearizadas en regiones como Medio Oriente, la península coreana y el sur de Asia, con el propósito de cancelar las vías que alienten la carrera armamentista y la proliferación nuclear, señaló la canciller Patricia Espinosa Cantellano.

Al encabezar la conmemoración del 40 aniversario de la Adopción y Apertura a la Firma del Tratado de Tlaltelolco para la Proscripción de las Armas Nucleares en América Latina y el Caribe, dijo que la realidad que vive hoy el mundo actualizan las razones que llevaron a establecer zonas libres de armas atómicas, y consideró que debe atajarse cualquier riesgo nuclear.

Ante integrantes del cuerpo diplomático acreditado en México, legisladores, funcionarios de organismos multilaterales y expertos internacionales en la materia, la titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) sostuvo que la eliminación de armas atómicas es elemento fundamental de la política exterior de México, y llamó a poner en marcha, con mayor solidez, un proceso de desarme nuclear.

En la ceremonia, realizada en la sede de la cancillería, la funcionaria responsable de la política exterior de México señaló que el Tratado de Tlaltelolco es una
de las mayores herramientas para erradicar las armas nucleares en la región y resaltó el alto perfil que el país tiene en los foros internacionales sobre desarme.

Reconoció que hacen "faltan mayores incentivos para sumar a varios países, principalmente de zonas meridionales", al desarme, e insistió en que es necesario insistir en que las potencias atómicas den garantías de seguridad al mundo.

Dijo que los Estados firmantes de los tratados internacionales en la materia deben retirar las acciones interpretativas sobre prescripción total del armamento nuclear, y convocó a todas las naciones a poner en marcha con mayor solidez un proceso de desarme mundial.

Por su parte, el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, subrayó que con la solidez moral que otorgan a los países de América Latina y el Caribe sus 40 años de contribución a la no proliferación de armas nucleares, debemos reafirmar nuestro rechazo a éstas y continuar denunciando su uso como una violación del derecho internacional y como un crimen contra la humanidad.

Llamó a las naciones del mundo a insistir en la importancia de establecer una zona libre de armas nucleares en el Medio Oriente.

Al acto asistieron también el subsecretario de Asuntos de Desarme de la Organización de las naciones Unidas (ONU), Nobuaki Tanaka; el juez de la Corte Internacional de Justicia, Bernardo Sepúlveda Amor; el director general del Tratado de Tlaltelolco, Rogelio Pfirter, y el secretario general del Organismo para la Proscripción de las Armas Nucleares en América Latina y el Caribe, Edmundo Vargas Carreño, quien, en su intervención, expresó la necesidad de hacer un reconocimiento a quienes contribuyeron a la creación del Tratado de Tlatelolco, en especial a su artífice, el embajador mexicano Alfonso García Robles, premio Nobel de la Paz.

Por la tarde, Insulza se reunió con el presidente Felipe Calderón Hinojosa, con quien intercambió puntos de vista sobre los principales temas de la agenda hemisférica, así como las nuevas acciones para ampliar la cooperación en favor del desarrollo y la prosperidad de los países de la región.

En un comunicado, la Presidencia de la República informó que Felipe Calderón refrendó la disposición de su gobierno para contribuir a fortalecer el sistema interamericano y apoyar las acciones que promueve el secretario general de la OEA con el propósito de reforzar las democracias de la región, con estricto apego al derecho internacional.