Ingresos petroleros fragilizan tributación, advierte la Cepal
En México el ingreso que genera la producción de hidrocarburos ha petrolizado las finanzas públicas fragilizando el sistema tributario, advirtió la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), al señalar que el petróleo ha inducido un círculo vicioso en el plano fiscal.
Explicó que esa ventaja les ha permitido a los tres niveles de gobierno beneficiar a las grandes empresas y contribuyentes pudientes cobrando pocos impuestos, así como tener administraciones tributarias con muchas ineficiencias y deficiencias, por lo que recomendó fortalecer a la Secretaría de Energía (Sener) y a la Comisión Reguladora de Energía (CRE) y disminuir el papel protagónico de la Secretaría Hacienda y Crédito Público (SHCP).
De acuerdo con el amplio estudio intitulado Panorama del sector energético en México: Grandes problemas, complejas soluciones, diagnóstico preparado para la CEPAL señala, a su vez, que la baja recaudación no petrolera que ha disminuido en términos del producto interno bruto, ha obligado a recurrir a los hidrocarburos como fuente de ingresos.
El extenso análisis enfatiza que la Secretaría de Hacienda prefiere aumentar la extracción y exportación de petróleo crudo, así como mantener precios elevados de los combustibles y la electricidad, que hacer una reforma fiscal que afecte al capital y las familias de altos ingresos.
Esto ha significado presión sobre el recurso natural y la industria petrolera: por una parte, el gobierno federal presiona a Petróleos Mexicanos (Pemex) para que mantenga o incremente la plataforma de producción, aunque ello signifique sobreexplotación del subsuelo y disminución de inversiones en actividades industriales de la cadena petrolera.
Por otro lado, Pemex soporta una carga fiscal excesiva que merma la salud financiera. Las tarifas eléctricas también dan origen a rentas económicas, las cuales son acaparadas tanto por algunos usuarios como por el fisco a través del superávit financiero de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Grandes empresas y clases pudientes, los más beneficiados
Sin embargo, las grandes empresas y las clases pudientes son las principales beneficiarias de las cuantiosas rentas que genera el sector energético, pues se evita afectarlas con mayores o nuevos impuestos, se les dan facilidades, se les fiscaliza poco y se les trata con mucha flexibilidad en caso de irregularidades.
Por otra parte, el ingreso petrolero que llega a la tesorería de los tres niveles de gobierno se utiliza principalmente para sufragar gasto corriente, y no para realizar inversiones estratégicas. Tampoco se usa para industrializar al país mediante el suministro de insumos aprecios inferiores al costo de oportunidad para el productor.
Más grave aún, la renta petrolera no se usa para hacer viable a la propia industria petrolera. No se usa como capital de riesgo para exploración de zonas fronterizas ni para fortalecer capacidad técnica y gerencial del Estado en materia de hidrocarburos.
El estudio señala que el tortuoso proceso legislativo del nuevo régimen fiscal da cuenta de las dificultades de la clase política para ponerse de acuerdo en algo elemental como la renovación de la renta petrolera que sostiene a las finanzas públicas.