El gobierno federal busca concluir la reforma al sistema de pensiones de empleados públicos
Ofrece Hacienda acciones para reducir la dependencia petrolera
Los esfuerzos para combatir la inseguridad serán un incentivo para la inversión privada, pues las empresas tendrán menores costos, destaca Carstens
Prevé un crecimiento de 3.6% en 2007
Ampliar la imagen El secretario de Hacienda, Agustín Carstens, saluda al subsecretario de Comunicaciones Manuel Rodríguez, durante la segunda cumbre anual financiera mexicana Foto: Cuartoscuro
El gobierno federal emprenderá acciones para, a partir de este mismo año, reducir la dependencia que tienen los ingresos públicos de la renta petrolera, anunció este jueves Agustín Carstens Carstens, secretario de Hacienda y Crédito Público.
Un día después que Petróleos Mexicanos (Pemex) difundió información que muestra la fragilidad de su situación financiera, en la que se encuentra por la transferencia de recursos al erario, Carstens aseveró que desde la Secretaría de Hacienda ''se está trabajando'' con el Congreso para encontrar soluciones a la dependencia petrolera de los ingresos públicos, ''y esperamos en los próximos meses que seamos capaces de llegar a un entendimiento''.
En un foro convocado por la revista Latin Finance, el titular de Hacienda anunció la intención del gobierno de concluir antes de que termine este año la reforma al sistema de pensiones de los empleados del sector público, y también dijo que los esfuerzos desplegados por el gobierno federal para combatir la inseguridad se traducirán en un incentivo para las inversiones privadas.
Carstens sostuvo que ''en la medida que México sea un lugar más seguro, con ley y orden, esto se va a reflejar directamente en costos más bajos para las empresas, y tendrá un impacto más directo en la competitividad''.
El miércoles pasado, Pemex difundió que en 2006 sus ingresos fueron en torno a los 100 mil millones de dólares, de los cuales 79 mil millones de dólares fueron enterados al fisco federal. Esta descapitalización de la empresa, que se prolonga por décadas, es provocada por la dependencia que tiene el Estado de los ingresos petroleros y que impiden a la compañía estatal realizar las inversiones requeridas para su desempeño.
Según datos de Hacienda, en 2000 los ingresos petroleros representaron 32.6 por ciento de los ingresos presupuestarios del sector público. En 2006, la relación de dependencia aumentó hasta llegar a 38.6 por ciento.
En su intervención en el foro de Latin Finance, al que asistieron de manera señalada representantes de fondos de inversión y firmas financieras internacionales con intereses en México, Carstens dijo que reducir la dependencia fiscal de los ingresos petroleros y la consiguiente reforma del sistema tributario para elevar la base de recaudación de impuestos son acciones con las que el gobierno actual busca generar condiciones para un mayor crecimiento.
''La economía ha ido cobrando fuerza y tiene un apoyo importante de la economía de Estados Unidos, que va mejor de lo anticipado; creemos que se puede crecer a una tasa de 3.6 por ciento en 2007 y que esta tasa se incremente en el tiempo'', añadió.
Mencionó a los asistentes al foro que el gobierno federal considera que fortalecer las finanzas públicas y reducir la dependencia petrolera permitirá contar con más recursos para invertir en educación, infraestructura, desarrollo rural y turismo, acciones que junto con un fortalecimiento de la banca de desarrollo y una mejor utilización de las facultades que tiene el Estado para regular y supervisar los mercados ''serán los instrumentos para el crecimiento''.
En particular sobre las finanzas públicas mencionó que el gobierno plantea reducir la dependencia del petróleo y también simplificar el pago de impuestos.
''Queremos reforzar las finanzas públicas, porque si seguimos como ahora, en seis años el déficit fiscal (que ahora no existe en la medición tradicional) se elevaría'' a un nivel que Hacienda estima en 3 por ciento del producto interno bruto, añadió. ''No hay una situación de emergencia, pero es importante que México como país vea cómo reforzar sus finanzas públicas para reducir la vulnerabilidad al petróleo y que haya un sistema fiscal más eficaz'', agregó.
Rogozynsky y los monopolios
En el foro estuvo como conferencista Jacques Rogozynsky, gerente general de la Corporación Interamericana de Inversiones (CII), una entidad del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y quien durante el gobierno del ex presidente Carlos Salinas de Gortari coordinó la entidad encargada de la mayor privatización de empresas públicas en la historia del país. En ese periodo se vendieron al capital privado Teléfonos de México, los bancos, empresas siderúrgicas, entre otras.
Ayer Rogozynsky, en una de sus intervenciones, habló sobre el tema de los monopolios en México. Comentó que efectivamente son un lastre para la actividad económica. ''Pero si vemos las concesiones, en ellas hay lineamientos para regular su actividad. Entonces hay que aplicar esos lineamientos para evitar que sean un lastre. Un problema en México es la aplicación de la ley. Hay que ver si se están aplicando las leyes existentes, incluyendo aquellas donde hay monopolios''.
En otra de sus intervenciones, Rogozinski cuestionó la idea de que existe una carencia de recursos para financiar proyectos de inversión que detonen crecimiento económico. En referencia al caso de México, planteó que tanto en el sistema financiero que opera en el país, como en los fondos de inversión e incluso de parte de organismos multilaterales como el BID hay suficientes recursos para invertir en proyectos de desarrollo. Pero el problema, afirmó, es que no se han estructurado esos proyectos para hacerlos atractivos. ''El problema no es de recursos financieros sino de ausencia de proyectos''.