De madrugada los llevaron a penales de Otumba y Toluca
Reubican a 16 de 135 presos amotinados anteayer en Neza
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Granaderos resguardan la entrada del penal Neza-Bordo luego del amotinamiento de unos 135 internos el viernes. Los reos denunciaron maltratos y escasez de comida
Foto: René Ramón
Nezahualcóyotl, Mex., 3 de febrero. La Dirección General de Prevención y Readaptación Social (DGPRS) del Estado de México reubicó la madrugada de este sábado a 16 de los 135 internos que se amotinaron el viernes en el penal estatal Neza-Bordo.
Antes, a la medianoche del viernes, unas 300 personas pudieron ingresar al área de locutorios del centro penitenciario y constatar el estado de salud de sus familiares, algunos de los cuales, dijeron, estaban golpeados.
Tras nueve horas de motín, el titular de la DGPRS, Alejandro Carmona Prantl, salió la noche del viernes del penal y anunció que la revuelta había terminado al llegar a un acuerdo con los reos para que varios fueran reubicados.
Sin embargo, los familiares de los reclusos dijeron hoy desconocer si en efecto las reubicaciones se realizaron de acuerdo con los reos o fue una decisión unilateral de Carmona Prantl.
Los familiares fueron informados del traslado de los reos a las cárceles de Otumba y Santiaguito poco antes del mediodía de este sábado, cuando empleados del penal salieron y colocaron en la puerta principal una lista con los nombres de los reubicados.
Los presos llevados a Otumba son Jorge López Ruiz, Octavio Romero García, Saúl Ordóñez Magaña, Armando Vivanco Coronado, Lauro García Pérez, Marco Antonio Sánchez Pérez, Juan Vázquez García y José Graciano Herrera.
Al penal de Santiaguito fueron trasladados Ricardo Pérez Rodríguez, Diego Botello Calderón, Noé García Cabrera, José Darío Galindo Romero, Gabriel Flores González, Germán Arévalo Gómez, Fernando González García y Juan Rubén Palacios.
Tras el motín, la Agencia de Seguridad Estatal ordenó el retiro de sus elementos. Sólo un destacamento de 100 granaderos, provenientes de Ecatepec y Texcoco resguardó el inmueble durante toda la noche.
Aunque la calma volvió al lugar las quejas de las madres, esposas y hermanos de los reos continuaron este sábado, pues algunos consideraron que lo correcto era que sus parientes fueran reubicados en penales de Texcoco o Chalco, y no hasta Otumba y Toluca.
Otros familiares, que pidieron el anonimato por temor a represalias contra los presos, dijeron que hasta el momento desconocen si los traslados se hicieron tras un acuerdo entre los reos y las autoridades, o Carmona Prantl lo decidió unilateralmente.
"Nosotros no estábamos de acuerdo en la reubicación, tampoco los internos. Lamentablemente Carmona Prantl actuó en forma arbitraria, porque es parte de su defensa y tiene que excusarse con algo", expresaron.
Además, afirmaron que sí hubo agresiones a los reos derivadas del amotinamiento, pese a que el titular de la DGPRS señaló que no hubo violencia en el interior del penal.
"Claro que sí hubo abusos, porque estaban golpeados. Cuando entramos a locutorios a verlos estaban dos custodios, uno en cada lado, no permitieron que habláramos con ellos, pero vimos que estaban golpeados en el rostro y el cuerpo, claro que hubo maltrato físico", señaló la hermana de uno de los internos.