Dos textileras dieron sabadazo; obreros exigen salarios de dos semanas y otros beneficios
Cierre de 3 fábricas deja sin ingresos a más de mil familias en Celaya
La ciudad, abierta a todas las empresas que busquen instalarse, dice el presidente municipal
Ampliar la imagen
Empleados de La Fábrica de Celaya manifiestan su desconcierto tras conocer el cierre de su fuente de trabajo. Con ésta suman tres las empresas que han cerrado en lo que va del año en esta ciudad y han dejado a más de mil familias sin ingresos
Foto: Martín Diego Rodríguez
Celaya, Gto., 3 de febrero. En las primeras tres semanas del año, igual numero de empresas instaladas en esta ciudad suspendieron sus actividades definitivamente y dejaron a más de mil familias sin ingresos. Dos de las compañías que cerraron fueron atraídas con recursos públicos a la entidad por el entonces gobernador Vicente Fox Quesada.
Empleados de La Fábrica de Celaya, dedicada a la maquila de ropa, cuentan que hace dos semanas, el 22 de enero, llegaron a su fuente laboral y encontraron que durante el fin de semana los dueños de la factoría, de capital extranjero, se llevaron la maquinaria y documentos ante la posibilidad de un embargo por parte del Instituto Mexicano del Seguro Social, al que adeudan casi medio millón de pesos.
Esta empresa se instaló en Celaya cuando Fox Quesada gobernó Guanajuato y el actual delegado de la Secretaría de Economía, José Manuel Mendoza Márquez, era secretario de Desarrollo Económico. Entonces recibió recursos públicos.
Los 350 trabajadores de la textilera denunciaron que el año pasado se programaron paros técnicos con el propósito de que los propietarios lograran más capital, el último sería el jueves 18 de enero y terminaría el domingo siguiente; sin embargo, cuando regresaron a laborar el lunes ya no había nada, "se llevaron todo, hasta los focos", dijeron.
En un principio los empleados pensaron que se trataba de un robo, pero al intentar encontrar a los propietarios de la empresa no los localizaron, por lo que dieron aviso a la Junta Local de Conciliación y Arbitraje.
Dos días después, la Procuraduría de la Defensa del Trabajo realizó el embargo precautorio en La Fábrica de Celaya. Arturo Villalobos Amador, titular de la dependencia, informó que se incautaron más de cien máquinas y advirtió que se seguirá procediendo conforme a la ley para garantizar los derechos de los trabajadores.
El 16 de enero, la empresa maquiladora Alatex, también textil, y apoyada para su instalación por el entonces gobernador Fox Quesada, se declaró en quiebra, pero fue después de dar un sabadazo a los 390 trabajadores, quienes llegaron a cubrir la semana laboral y encontraron las puertas cerradas.
En ambos casos, los ex trabajadores reclaman el salario de la primera quincena de enero, fondo de ahorro, la segunda parte del aguinaldo y una parte de prestaciones económicas que no les fue otorgada.
La primera empresa que cerró en Celaya este año fue Avonova, perteneciente al grupo Avon Cosmetics, que anunció el 11 de enero que terminaría su relación laboral con los 300 trabajadores de la fábrica de empaques plásticos para productos de belleza.
Ante las más de mil plazas laborales perdidas en lo que va del año en este municipio, se buscó al secretario de Desarrollo Económico y Sustentable del gobierno, Héctor López Santillana, quien no pudo ser localizado.
El alcalde Gerardo Hernández había advertido que "no se permitiría el arribo de nuevas maquiladoras a la ciudad a menos que den la seguridad, que se comprometan a quedarse en forma definitiva"; sin embargo, después se desdijo: "la ciudad de Celaya está abierta a todas las empresas que busquen instalarse".
No obstante, se comprometió a boletinar a los dueños de La Fábrica de Celaya, los armenios Grigor Amiriam, Sarkis Parsamian y Gagik Rushayan, para evitar que en otras partes del país "huyan" igual que aquí.