La población dejó de crecer en varios estados del país sin que se reduzcan nacimientos

Migran más mexicanos a EU de lo que se ha calculado: BdeM

Aun con avance de 5%, la diferencia salarial entre ambos países permanecerá hasta 3 décadas

Descarta director que medios de transferencia de remesas se utilicen para el lavado de dinero

ROBERTO GONZALEZ AMADOR

La migración de mexicanos hacia Estados Unidos "es mucho mayor" de lo que se ha estimado. En varios estados del país, sostuvo este viernes el Banco de México, la población ha dejado de crecer, pero no por una caída de la tasa de natalidad sino por la emigración. "Hay una relación claramente negativa" derivada de este fenómeno, afirmó Jesús Cervantes González, director de Medición Económica del banco central.

En el foro Inversión de los recursos de los migrantes: resultados de las alternativas vigentes, el funcionario del banco central manifestó que aun si la economía nacional lograse tasas de crecimiento superiores a 5 por ciento ­que no se han visto en los últimos seis años­ la diferencia de salarios entre México y Estados Unidos causará que el incentivo de los trabajadores mexicanos para irse a aquel país permanecería "por dos o tres décadas".

Para el funcionario del Banco de México se debe descartar la posibilidad de que los mecanismos de transmisión de remesas puedan ser empleados por grupos de delincuencia organizada para el lavado de dinero.

El evento, convocado por el Fondo Multilateral de Inversiones (Fomin), una entidad del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Instituto de las Américas, organización privada con sede en San Diego, dejó claro que las remesas se mantendrán como una fuente significativa y estable de recursos para México, aun cuando su tasa de crecimiento han comenzado a perder impulso, como lo reveló el miércoles pasado el banco central. En el foro se puso de manifiesto también que cada vez un porcentaje mayor de ese dinero se destina a inversión en un bien duradero o en financiar educación y servicios de salud y ya no sólo al consumo, como ocurría de manera preponderante hasta hace tres años.

El miércoles pasado, el Banco de México informó que las remesas alcanzaron el año pasado 23 mil 54 millones de dólares, 15.1 por ciento más que en 2003. En los cinco años previos, la tasa anual de crecimiento de este flujo de dinero superó 20 por ciento en cada caso. Una encuesta presentada el jueves pasado por Sergio Bendixen, director de la firma de consultoría Bendixen y Asociados, especialista en temas de migración, calculó el ingreso de remesas a México en 2006 en 25 mil millones de dólares. El especialista atribuyó la diferencia con respecto a la cifra del banco central al dinero que llega por correo o "en el mano a mano".

"Por más que crezca la economía de México seguirá la migración", declaró ayer Lorenza Martínez Trigueros, titular de la unidad de seguros, valores y pensiones de la Secretaría de Hacienda. Sustentó su afirmación en que Estados Unidos necesita trabajadores y México capital. "El diferencial de salario entre los dos países va a seguir y por lo tanto el incentivo a migrar va a seguir", declaró la funcionaria.

En términos de la política oficial, Martínez Trigueros dijo que el actual gobierno buscará generar alternativas para un uso más eficiente de los recursos de las remesas. En este sentido, anunció que se mantendrán los programas creados en la administración federal pasada: los que promueve el Banco del Ahorro Nacional y Servicios Financieros, conocidos como La Red de la gente; el llamado 3X1, en que los gobiernos estatales y federal ponen tres dólares por cada uno que aportan grupos de migrantes para obras de desarrollo en comunidades mexicanas; y la promoción de inversión en vivienda.

En una de las mesas de trabajo del foro se trató el tema específico de la vivienda y su relación con las remesas. Desde hace dos años existe la posibilidad de que un trabajador mexicano residente en Estados Unidos contrate un crédito hipotecario para adquirir una propiedad, o mejorar una que ya posea, en México.

Bajo este programa, en el que participan el gobierno y empresas desarrolladoras de vivienda e hipotecarias, se han concedido mil 900 créditos, informó Guillermo Babatz, director general de la Sociedad Hipotecaria Federal, entidad del gobierno federal. Si la cifra es modesta, el hecho es que el último año la entrega de este tipo de préstamos creció a más de 300 por ciento, lo que apunta su potencial. El funcionario dijo que a través de estos esquemas un mexicano residente en Estados Unidos está adquiriendo viviendas de 65 mil dólares en promedio, mientras que los créditos originados en México son, en promedio, del equivalente en pesos a 35 mil dólares (350 mil pesos).

Babatz dijo que las tasas de interés a los créditos originados en Estados Unidos son similares que a los concedidos en México.