Desde hace más de 80 años habitantes ocupan predios sin tener escrituras

Enfrentan incertidumbre en La Fama por falta de títulos

Demandan al jefe de Gobierno capitalino intervenga para regularizar esa situación

ROCIO GONZALEZ ALVARADO

La incertidumbre jurídica en la tenencia de la tierra en el barrio La Fama, en la delegación Tlalpan, va más allá del caso de la ex fábrica de hilados y tejidos La Fama Montañesa, dado que una buena parte de sus habitantes está en posesión de los predios desde hace más de 80 años sin tener títulos de propiedad.

Ante ello, los colonos acordaron solicitar al jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard Casaubon, su intervención para regularizar el conjunto de lotes que conforman el barrio, pues no sólo ocasiona enfrentamientos constantes entre familiares, sino también con quienes se dicen dueños de la tierra y con las propias autoridades delegacionales.

Actualmente, agregaron, la propiedad de la tierra en el barrio, que se conforma por 228 lotes distribuidos en 10 manzanas, tiene diferentes estatus: propiedad ejidal, propiedad pública ­en donde se ubica el parque nacional Fuentes Brotantes­, propiedad privada ­individual y copropiedad­, lo cual ha sido investigado, sin que se haya aclarado esta situación.

A ello se suma que tanto la ex textilera como el barrio son parte de un perímetro considerado como zona de valor patrimonial por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), según el decreto que se emitió en el Diario Oficial de la Federación sobre monumentos históricos el 5 de diciembre de 1986.

En ese sentido, la propuesta de la comunidad es convertir la ex fábrica La Fama Montañesa en un espacio cultural, donde se promueva y difundan las aportaciones de los trabajadores textiles a la historia del país, se recupere la memoria colectiva, se preserve su identidad, tradiciones, cultura e historia, así como se incluyan las formas de organización de los habitantes del barrio.

En dicha iniciativa se incluye, además, la exigencia de que se lleve a cabo un proceso para regularizar la tierra y se cuente con un proyecto de ordenamiento urbano en la zona, para que se proteja el área ecológica, se preserve su valor histórico y patrimonial, y se respete la identidad de los descendientes de los trabajadores.

Y es que justamente el barrio La Fama surgió a raíz del establecimiento de la textilera en 1831, dado que los patrones permitían que los trabajadores construyeran sus viviendas en los terrenos pertenecientes a la factoría.

A partir de un conflicto en la fábrica hacia la década de los años 40, en el siglo pasado, se realizó una serie de acuerdos, según se testifica en el libro Manantial de Historias. El barrio La Fama Montañesa 1939-1980, que incidieron en el destino de la textilera y el barrio. En ellos se reconoce los derechos de posesión de los trabajadores sobre los terrenos que ocupan y se hace el compromiso de extender escrituras.

Esto último no se logró en la mayoría de los casos, manifestaron los vecinos, debido a componendas entre los líderes sindicales, lo que dejó en la incertidumbre sobre la propiedad a cientos de familias.

Aunque el anterior gobierno de Tlalpan inició una investigación al respecto, nunca se presentaron los resultados de los trabajos, por lo que consideraron necesario retomar el caso con la intervención del gobierno central, a través de las dependencias correspondientes, para poner fin a esta situación, apuntaron.