Anuncian guaraníes marcha contra el gobierno de La Paz
Camiri, 30 de enero. Los indígenas guaraníes del gran Chaco se sumarán a las protestas de los pobladores de Camiri, quienes reclaman que la nacionalización de los hidrocarburos beneficie a la región, al anunciar movilizaciones a partir del 2 de febrero que iniciarán con un bloqueo de la estratégica carretera de Santa Cruz.
"Está claro que el presidente Evo Morales sólo atiende las necesidades de los pueblos del occidente aymaras y quechuas, por eso los guaraníes nos vamos a movilizar" en demanda de "una verdadera nacionalización de los hidrocarburos", señaló el dirigente indígena Wilson Changaray, de acuerdo con una decisión de la Asamblea del Pueblo Guaraní (APG).
Changaray señaló que la APG, que agrupa a cerca de 130 mil indígenas del gran Chaco, decidió sumarse al movimiento de Camiri porque es la única forma en que han logrado que se escuchen sus demandas en el país. Asimismo, calificó de "ofensa" al pueblo guaraní la ausencia oficial al acto conmemorativo de la batalla de Kuruyuqui el domingo pasado.
Ese día los guaraníes esperaban que llegara el vicepresidente Alvaro García Linera con un decreto supremo reconociendo la existencia de la nación guaraní, la creación de un fondo de desarrollo, la titulación de tierras comunitarias de origen, al tiempo que planeaban exigirle su participación en los asuntos de los hidrocarburos, pues en sus tierras están las principales reservas de gas.
Este martes se cumplió el segundo día de huelga general por tiempo indefinido en esta ciudad de 30 mil habitantes. Además, hay dos bloqueos que cortan la carretera que viene de Argentina y Paraguay hacia Santa Cruz, siendo los más afectados los transportistas de productos perecederos.
El comité de huelga, en que participan grupos cívicos, sindicatos y representantes municipales de la región, rechazó la invitación a dialogar mañana en Yacuiba, hecha por el ministro de Hidrocarburos, Carlos Villegas, pues desde el 22 de enero la asamblea de la Chaqueñidad acordó que todo diálogo deberá realizarse "en Camiri y de cara al pueblo".
En tanto, el gobierno de Evo Morales expresó su disposición a flexibilizar el incremento de impuestos a las exportaciones mineras, a fin de frenar las protestas de los trabajadores del ramo de empresas privadas, que se oponen al proyecto.
Por su parte, los sindicatos campesinos de la provincia de Pando expresaron su rechazo a un plan de Brasil de construir dos plantas hidroeléctricas en el río Madera, en la frontera de la selva del Amazonas, al considerar los daños que causarían al ecosistema.